Las encías son la base de los dientes y por ende deben ser cuidadas para que goces de buena salud bucal. Cualquier problema en ellas afecta gravemente la boca en general.

Si notas que el color de las encías cambia o comienzas a presentar algún tipo sangrado, será hora de ser evaluado por un odontólogo.

Prevención

Para mantener sanas tus encías, es necesario que tengas una alimentación adecuada. Existen nutrientes que ayudarán en la formación y salud de los dientes y las encías. Entre ellos está el calcio, el fósforo, el flúor, la vitamina D, la vitamina A y las vitaminas del grupo B.

Vitaminas que debes consumir

• Vitamina E. Utilizada por los odontólogos para tratar diversos problemas orales. Puede ser uno de los principales suplementos para unas tener unas encías sanas. La aplicación de aceite de vitamina E en la zona afectada, alivia el dolor y mejora el aspecto de las encías cuándo estas están dañadas. También es antioxidante.
• Vitamina D. Gracias a su estructura facilita la absorción de calcio y fósforo, necesarios para tener huesos y dientes sanos. Si consumes de manera adecuada la vitamina D obtendrás unas encías mucho más fuertes. Esta vitamina se encuentra en el pescado azul, en el aceite de hígado de pescado, en la margarina, los huevos, la leche y los productos lácteos.
• Vitamina C. Con la ingesta de esta vitamina ayudarás a fortalecer el colágeno de las encías y del resto del organismo. El colágeno es necesario en la formación de la piel, los músculos, los vasos y otros órganos internos. Su función es primordial en los procesos de reparación y cicatrización de estos tejidos. Además, de que interviene en la formación de cartílago, tendones, huesos y dientes, favoreciendo la adecuada formación de material osteoide y la función de los osteoblastos.

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