Existe un gran número de deportes que puedes realizar para estar en forma; pero hoy en día el spinning junto con el aeróbic está convirtiéndose en uno de los preferidos en los gimnasios por sus múltiples beneficios en el entorno cardiovascular y para la tonificación muscular. Asimismo fortalece al corazón, fortifica el abdomen y las piernas, adelgazando la cadera y los muslos, aumenta el nivel de motivación personal y la concentración.
El spinning consiste en la realización de ejercicios sobre la bicicleta, compaginándolos con la música y efectuando coreografías. Los ritmos son diversos, pudiendo ir desde una gran lentitud, a una velocidad máxima, donde también se combinan las intensidades de trabajo. En sesiones de 40 minutos, queman en promedio 500 calorías, hasta un máximo de 800.
Algo que no podemos olvidar a la hora de realizar spinning y que un buen profesor o instructor del mismo siempre ha de insistir en ello, es la corrección postural. La enorme combinación de ejercicios mencionados, el efectivo trabajo realizado, los beneficios que se buscan, pueden no conseguirse sin una correcta posición sobre la bici, donde, en todo momento tengamos en tensión el abdomen (a modo de corsé) y una buena elevación de la línea de hombros, sin llegar a arquear la espalda.
Este junto con un adecuado tratamiento de la intensidad con la que se trabaja, es el secreto del éxito de esta disciplina.
La fórmula es simple
Una bicicleta fija, pedalear y seguir las instrucciones del instructor acerca de la postura por adoptar, la velocidad de pedaleo y el nivel de carga. Las personas con problemas de rodilla deben elegir desarrollos no muy duros para no forzar esta articulación.