El dar un beso es una de las acciones donde se demuestra amor y cariño hacia una persona. El roce de los labios genera muchas reacciones sensoriales que favorecen a nuestro organismo.
Según los especialistas, al besarnos movemos hasta 36 músculos y nuestro ritmo cardíaco se acelera de 60 a 100 latidos por minuto. También, cada beso ayuda a consumir, como mínimo, 12 calorías.
Pensarías que es desagradable, pero el intercambio de bacterias al besarnos ayuda a reforzar nuestro sistema inmunológico y despierta la producción de la serotonina, que nos disminuye el sentimiento de la tristeza.
Además, un beso intenso nos ayuda a liberar adrenalina, baja los niveles de colesterol y eleva los niveles de dopamina, que ayuda al aumento de la memoria de corto plazo y la función motora del organismo. Son cinco nervios que mandan señales a nuestro cerebro cuando realizamos este bonito acto de amor y estos también hacen que percibamos satisfacción.
¿DÓNDE PREFIERES LOS BESOS? CONOCE SU SIGNIFICADO
Según estudios, las mujeres al momento de disfrutar un beso apasionado, mandamos más señales a nuestro cerebro y recibimos mayor estimulación. Otro componente no menos importante es la testoterona: hace que se eleven los niveles y genera apetito sexual en los hombres.
¿Es peligroso dar un BESO?
Los autores de la investigación también señalan que las parejas que se besan al menos nueve veces al día comparten comunidades similares de bacterias orales.
El ecosistema de más de cien billones de microorganismos que viven en nuestro cuerpo, el microbioma, es esencial para la digestión de los alimentos, la síntesis de nutrientes y la prevención de la enfermedad. Se forma por la genética, la dieta y la edad pero también por las personas con las que interactuamos.
Con la boca siendo la anfitriona de más de 700 variedades de bacterias, la microbiota oral también parece estar influenciada por las personas más cercanas a nosotros.
Investigadores de Micropia y TNO en Países Bajos estudiaron a 21 parejas que rellenaron cuestionarios sobre besos, incluyendo la frecuencia media con la que se daban un beso íntimo, y tomando muestras de su lengua y saliva para investigar la composición de su microbiota oral.
Los resultados mostraron que cuando las parejas se besan de forma íntima con relativa frecuencia su microbiota salival se vuelve similar. En promedio, los investigadores detectaron que al menos nueve besos íntimos por día provocaron que las parejas compartieran de manera significativa su microbiota salival.
BESOS PARA DECIR LO QUE QUIERAS
El autor principal del trabajo, Remco Kort del Departamento de Microbiología y Biología de Sistemas de TNO y asesor del Museo de Microbios Micropia, explica: “El beso íntimo que implique contacto completo con la lengua y el intercambio de saliva parece ser un comportamiento de cortejo exclusivo de los humanos y es común en más del 90 % de culturas conocidas”.
Ahora ya sabes que los besos son necesarios y útiles para mantener un equilibrio de salud en nuestro cuerpo. Así que disfruta más cuando te pidan un beso.