Si eres de los que les cuesta madrugar o prefieres quedarte en tu casa los viernes y descansar, aquí tienes una razón más para seguir durmiendo ya que científicos de Harvard han descubierto que el sueño protege al corazón.
La falta de sueño afecta las células madre de la sangre de tal forma que favorece la acumulación de placas de grasa en las arterias. Por tanto las enfermedades cardiovasculares están a la orden del día según una investigación liderada por la escuela de medicina de Harvard.
Ya existen investigaciones acerca del tema que demuestran una relación estadística entre el déficit del sueño y enfermedades como la diabetes y canceres. Harvard propone un mecanismo causa-efecto entre el déficit del sueño y daños a las arterias.
La falta de sueño afecta a las células madre de la sangre de una manera que favorece la acumulación de placas de grasa en las arterias y por lo tanto las enfermedades cardiovasculares, según una investigación liderada por la Escuela de Medicina de Harvard.
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La clave está en la hormona hipocretina
La clave está en la hormona hipocretina, también llamada orexina, que se reduce en situaciones de falta de sueño. Dicha hormona se segrega en el hipotálamo, un importante centro de mando situado en la base del cerebro que regula variables vitales como el hambre, el sueño o la temperatura corporal.
Según los resultados presentados en Nature online, la hipocretina incide en las células madre de la sangre situadas en la médula ósea. Concretamente, el déficit de hipocretina debido a la privación de sueño provoca en la médula ósea una mayor producción de la proteína CSF-1. El aumento de CSF-1, a su vez, provoca una mayor producción de dos tipos de células sanguíneas: los neutrófilos y los monocitos.
Estos dos tipos de células son precisamente responsables de la acumulación de placas de grasa en las arterias, también llamadas placas de ateroma- que están en el origen de infartos y embolias.
“Hemos descubierto que perturbar el sueño afecta a la producción de células inflamatorias, lo que lleva a más enfermedad cardíaca”, declara el inmunólogo Filip Swirski, director de la investigación.
Ahora ya tienes una razón más para no desvelarte, debes tener en cuenta que especialistas recomiendan que debemos dormir de 7 a 8 horas máximo para reponer las energías gastadas y además ahora cuidar tu salud cardiovascular.
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