Música, aeróbicos, patadas y golpes al aire son los elementos que conforman el fitness de combate, un método que, a pesar de ser implementado hace casi 10 años, está cobrando fuerza gracias a que muchas personas alrededor del mundo siente que esta alternativa les ayuda a bajar de peso y quemar la calorías.
La mezcla de los ejercicios con deportes como el boxeo, el karate, el tae kwon do y el muay thai, convierten a este crossfit en una sesión divertida y apta para cualquier persona, sin importar su género o su edad.
A pesar de que los deporte que involucra son de mucho contacto, el fitness de combate no tiene como objetivo principal la pelea, sino que es una rutina que puede aumentar de intensidad en la medida que la persona que lo practica se sienta capaz y en confianza consigo misma.
Una hora de fitness de combate permite quemar entre 800 y 1000 calorías por rutina, por lo que los entrenadores recomiendan que se practique entre dos y tres veces por semana. Basados en los resultados de quienes lo practican, los entrenadores aseguran que este técnica genera cambios físicos y emocionales.
Cada sesión comienza con calentamientos, movimientos articulares y se incorporan leves movimientos de boxeo. Luego, el profesor va enseñando las técnicas de patadas, golpes y esquives que llevará la rutina, con la coreografía de una eufórica canción. Culmina con un trabajo en la musculatura abdominal y un momento de relajación.
Entre otras ventajas que ofrece el fitness de combate están:
- Mejora el rendimiento atlético, deportivo y motor.
- Aumenta la fuerza, resistencia, potencia muscular, velocidad y la composición corporal.
- Promete un aumento de la autoestima y disminución del estrés.
Fuente: Infobae