La época de las fiestas de fin de año se podría definir como un alegre caos, tal como lo pintan en las películas. Pero si la presión aumenta demasiado, podría desbordarnos y hacer que terminemos sufriendo en lugar de disfrutar de estas fechas.
Por eso, antes de que se desate este alegre caos, te advertimos sobre estos hábitos que aumentan el estrés de las fiestas de fin de año para que puedas evitarlos.
Demasiadas expectativas
Muchas soñamos con una fiesta de fin de año sacada de un comercial de televisión. Pero cualquier fiesta que incluya a varias personas corre el riesgo de sufrir todo tipo de percances; mayor el riesgo cuantas más personas. Así que baja las expectativas, tómate todo con calma y concéntrate en disfrutar lo más posible.
No ajustarte al presupuesto
¡En las fiestas hay tanto en lo que gastar! La comida, la bebida, la ropa, la decoración, los regalos. El problema es que si no te ajustas la presupuesto, sufrirás la “resaca” de los gastos descontrolados en enero, cuando llegue el estado de cuenta de la tarjeta de crédito.
Buscar el regalo perfecto
Seguro que a ti también te gusta cuando alguien te da el obsequio perfecto, justo eso que estabas deseando. Y es probable que trates de hacer lo mismo con las personas en la lista de regalos. ¡Pero cuidado con obsesionarte con encontrar el regalo perfecto! Un regalo de corazón con alegría es mejor que un regalo supuestamente “perfecto” que te llenó de estrés.
Comer y beber en exceso
Con tantas fiestas y reuniones, y tanta comida y bebida deliciosa y variada, la tentación de comer y beber en exceso nos acecha casi cada día del mes de diciembre. Sin embargo, nuestro cuerpo terminará pasándonos la factura y podemos sufrir de mala digestión o ataques al hígado. ¡Y por supuesto, el riesgo de aumentar de peso!
Si logras evitar, o al menos reducir la tensión que causan estos hábitos de las fiestas navideñas, ¡disfrutarás mucho más!