Comer frutas y verduras tiene múltiples beneficios, aún más en los niños ya que están en la época donde se forman las defensas, se construyen los hábitos (buenos o malos) y se encuentran en la etapa de crecimiento. ¿Por qué tu hijo debe comer frutas y verduras de forma regular? Averígualo a continuación:
Aportan nutrientes
La razón más importante por la que un niño debe comer frutas y verduras es porque son las mayores fuentes de nutrientes y vitaminas, elementos que tu hijo necesitará para luchar contra enfermedades, además evitarás que sufra de obesidad o al contrario, anemia.
Los hidrata
Las grandes cantidades de agua que poseen las frutas y verduras ayudará a que tus hijos se mantengan hidratados. Esto hará que el proceso de eliminación de toxinas sea más eficiente y el organismo lo hará más fácil.
Aportan fibras
La fibra ayudará al buen funcionamiento del sistema digestivo. Si consumen frutas y verduras de forma regular evitarás que padezcan de problemas como estreñimiento. Las verduras con mayor contenido de fibra son: el brócoli, espárragos, espinaca, acelga, zanahoria, alcachofas y güicoy. Mientras que las frutas que aportan más fibra son las manzanas, bananos, mandarina, higo, ciruela, melocotón y pera.
Mejoran hábitos alimenticios
Es más saludable que luego de una jornada de estudio o de juegos vayan a la refrigeradora o al estante y tomen una fruta a que coman alguna chuchería. Recuerda que estos hábitos se aprenden y es mucho más fácil fomentarlo cuando tus hijos aún están pequeños.
Bajos en grasa
Son un aperitivo perfecto porque no poseen grasa y las que poseen son grasas saludables. Por ejemplo el aguacate, las aceitunas o la soja.
Son antioxidantes
Es decir que las propiedades que contienen previenen que los radicales libres dañen las células, lo que evita que se desencadenen enfermedades degenerativas.