Los niños normalmente aprenden mejor de lo que ven, no necesariamente de lo que escuchan. Es por ello que se vuelven un reflejo de los padres, siendo que los imitan casi a la perfección, de vez en cuando los hijos dejan ver los aciertos que sus progenitores tienen, aunque por lo general tienden a señalar más sus errores y desaciertos.
Ante esto una excelente herramienta que se les puede "heredar" a los hijos desde temprana edad es: mantener la calma en situaciones difíciles, para que en su momento, ellos aprendan también a calmarse, a pensar antes de actuar, no reaccionar impulsivamente o simplemente disfrutar con calma de cualquier actividad como lo puede ser una sencilla comida en familia.
La práctica de yoga nos ayuda a desarrollar estas cualidades, de actuar desde la calma. Con el tiempo, esto se vuelve una actitud, donde remplazamos el juzgar las situaciones y a las personas, con el disfrute de lo que cada situación (aunque sea difícil) nos esta ofreciendo.
Tus hijos no necesariamente verán el trasfondo de la enseñanza, pero lo más seguro es que intentarán copiarte. Eso mejorará notablemente tus lazos de confianza con él y antes de cuestionarte el porqué le pides que haga algo que tu mismo no puedes hacer aprenderá a pedir consejo y dirección de ti.
Algunas sugerencias para iniciar a practicar yoga con ellos:
- Si practicas en casa, comparte tu tapete con ellos. No necesitan de una gran área, pueden simplemente acomodarse en cualquier lugar e ir practicando posturas, comenzando con las más sencillas, aquellas que te salgan a ti.
- Practicar yoga va mucho mas allá de las posturas. Pueden sentarse a sentir su respiración, también podrías acostarlos en tu cama y que juntos exploren los movimientos del pecho o del abdomen cada vez que inhalan y exhalan. Pueden jugar a alargar la respiración, hacerla larga o corta, acelerada o pausada. La idea es familiarizarse con esta función tan simple y natural que realizamos todos ¡respirar!
- Mediten juntos. Pueden sentarse en cualquier rincón, de hecho pueden buscar un lugar apropiado dentro de tu hogar o fuera de el donde siempre puedan sentarse a hacerlo. Pueden poner una canción, buscar una meditación guiada, simplemente estar en silencio, o tomarse de las manos haciendo un círculo. Es una forma diferente de estar juntos y compartir un espacio, así como de fortalecer el intercambio energético entre ustedes.
- Cantar es una excelente idea. A los niños les encanta cantar el OM. Hay algunos que les causa risa, o se sienten incómodos, otros lo toman a juego y se divierten haciéndolo. Si te sientes cómodo haciéndolo pueden intentarlo y mas adelante incluir algún otro mantra de tu preferencia. Enseñales a escuchar su propia voz y no tener miedo de expresarse con los medios adecuados.
- No te lo tomes tan enserio. Recuerda que para los niños, todo es juego. Es su forma de aprender e integrar la información. Si tienen dudas busquen la respuesta juntos, si empiezan a distraerse deja que descansen y que retomen la actividad en otro momento. Si después los ves colgados de los muebles de tu sala, es normal, quizás nosotros de adultos también nos gustaría hacerlo pero ya no nos permitimos esas conductas. Dejalos que se diviertan, que sean espontáneos y aprendan a partir del juego.