El cardiólogo Joaquín Esquivel García brinda información sobre serios aspectos para no tomar a la ligera algunos síntomas.
1. LA PRESIÓN ALTA NO ES SINÓNIMO DE ENFERMEDADES DEL CORAZÓN.
La presión arterial tiene varios factores que la modifican, por ejemplo: la hora, el estrés, el dolor, haber dormido mal, etc. Si a una persona se le encuentra la presión por arriba de 140/90 mmHg, (el límite) y no tiene historial, es aconsejable repetir el proceso después de 30 minutos de estar en reposo. Si vuelve a salir un valor por arriba del límite, probablemente esta persona es hipertensa.
2. LA SAL, UN FACTOR AL QUE PRESTARLE ATENCIÓN.
La sal está formada por cloro y sodio, este último hace que se retengan líquidos en el cuerpo, al haber más líquido dentro de las arterias, la presión se puede subir; pero una persona con sus riñones funcionando correctamente puede manejar cantidades aumentadas de sal sin que esto suba la presión.
3. DE GENERACIÓN EN GENERACIÓN.
El factor genético, ambiental, social y cultural pueden hacer que una persona tenga sobrepeso, estrés y malos hábitos que lo vuelvan hipertenso.
4. CUESTIÓN DE BIENESTAR GENERAL.
La hipertensión no controlada afecta a todos los órganos, desde el cerebro, aumentando el riesgo de un derrame cerebral; la retina en los ojos, las arterias de grande y pequeño calibre, los riñones y el corazón, provocando insuficiencia cardíaca, cardiopatía isquémica y arritmias. La hipertensión es una enfermedad silenciosa, es decir que no da síntomas.
Si tienes más dudas, consulta al Dr. Joaquín Esquivel García al correo: dresqui1966@gmail.com o al los teléfonos 2557-3370 y 7702-9555.