Nunca es demasiado temprano ni demasiado tarde para comenzar a cambiar tu estilo de vida.
Por ejemplo, durante estas fiestas navideñas, comenzar una rutina de ejercicios consistente, controlar las porciones y activar las redes sociales como ayuda para no perder el rumbo pueden hacer una gran diferencia al momento de poner en práctica las resoluciones que se toman para el Año Nuevo.
Según los expertos en salud, implementar un enfoque basado en la abstinencia no es lo más recomendable. Tampoco sirve enfrentar el problema de manera muy agresiva, con dietas de moda extremadamente restrictivas o rutinas de ejercicios imposibles de cumplir. Por lo general, las personas no se dan cuenta de que tienen diversas herramientas para lograr el éxito. Sin embargo, al desconocer estas herramientas, suelen abandonar sus esfuerzos rápidamente.
Para vivir de manera más saludable y feliz, llevar un estilo de vida más activo y no perder el rumbo durante los preparativos para el Año Nuevo. Para ello, es importante recordar el concepto de C.A.R.E (del inglés Create, Activate, Resolve, Eat):
- Crea objetivos y resoluciones específicas y alcanzables. Recuerda que buscamos cambiar nuestro estilo de vida para lograr resultados duraderos y sostenibles en el tiempo. Las dietas de moda y el exceso de ejercicio son algo temporario y no sostenible en el tiempo.
- Activa tus redes sociales para que te ayuden a lograr tus objetivos. Rodearte de personas que piensan de manera similar lo ayudará a no perder el rumbo. Esto incluye a aquellas personas que te ayudarán a no autosabotear tu dieta o a sobrellevar la ansiedad asociada con la pérdida de peso.
- Realiza cambios leves en su estilo de vida. Crear un hábito lleva tres semanas. Agrega frutas y verduras a todas tus comidas, salga a caminar, usa la escalera en vez del elevador, parquea tu carro más lejos y camina.R
eemplazar la gaseosa por agua durante una comida equivale a suprimir 150 calorías y alrededor de 10 cucharadas de azúcar de su dieta diaria.
- Ingiere comidas balanceadas que incluyan frutas y verduras, cereales integrales y alimentos ricos en proteína que te ayuden a mantener la energía y reducir el apetito.