La Navidad y las vacaciones configuran una de las épocas de mayor disfrute para todos. Sin embargo, como cada período del año, esta temporada no está exenta de enfermedades que afectan mayormente a los niños debido a la fragilidad de su sistema inmunológico (sus defensas) que aún se encuentra en desarrollo.

Es importante que como padre de familia te informes bien de cuáles son esas enfermedades que despuntan en la época navideña y que tomes las medidas necesarias para proteger la salud de tu familia.

Según explica el doctor Carlos Enrique Mena, jefe del Departamento de Epidemiología del Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom, son tres las enfermedades más comunes en los menores que se atienden en esta temporada:

1.    Neumonía: es una infección aguda de las vías respiratorias bajas (abarca los pulmones) que se adquiere por las gotículas que circulan en el ambiente. Se contagia por virus, bacterias, por hacinamiento, por el cambio de clima y por los climas helados (que son preferibles por los virus). Esta enfermedad afecta más a niños y ancianos y puede iniciar por medio de una gripe o una faringitis que no son tratadas adecuadamente y que luego se complican.

Desde inicio de año hasta la primera semana de diciembre, el Hospital Bloom atendió 738 casos de neumonía, de los cuales 357 pacientes fueron ingresados por la gravedad de la enfermedad (lo que representa un 48% de las atenciones totales) y 32 niños fallecieron debido al avance de la enfermedad y a su corta edad.

Síntomas de neumonía: entre los más destacados se encuentran la tos con flema, la mucosidad, fiebre alta en la mayoría de casos y el cansancio o dificultad para respirar.

¿Cómo prevenir la neumonía?

• Es necesario evitar el frío, abrigándose adecuadamente, protegerse del polvo, el humo y los vientos fuertes.

• También es preciso cuidar al extremo a quienes ya se encuentran débiles por alguna otra enfermedad (gripe, tos, infecciones) para que no se complique aún más su salud.

• Evitar acercarse a personas que ya posean el virus.

2. Diarrea: esta enfermedad aparece cuando una persona evacúa cámaras líquidas tres o más veces en el día. Para el caso de los niños, la diarrea incrementa en los últimos meses del año a causa del tipo de comida que consumen en vacación. Por lo general, en esta temporada los padres descuidan el tipo de comida que le permiten comer a sus hijos o simplemente los niños suelen comer más alimentos en la calle que en sus casas. Desde inicio de año, el Hospital Bloom atendió un total de 1068 casos de diarreas, reportando el fallecimiento de 23 niños a causa de la gravedad de la enfermedad.

Complicaciones de la diarrea: generalmente, la diarrea aparece con fuertes dolores en el estómago, ardor en la zona de evacuación (ano) y el mayor riesgo de esta lo compone la deshidratación que genera al organismo y, con ella, el debilitamiento del cuerpo.

¿Qué hacer ante síntomas graves de diarrea?

• Lo principal es acudir al médico para que este asigne el tratamiento y medicamentos adecuados.
• Darle al paciente abundante suero oral para disminuir los efectos de la deshidratación.
• Ingerir alimentos saludables y libres de grasa o condimentos que pueden agudizar el problema.

Dr. Carlos Enrique Mena, jefe del Departamento de Epidemiología del Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom

• Tener medidas higiénicas adecuadas: lavarse las manos antes de preparar los alimentos.
• Estar pendientes de que los niños se laven las manos antes de comer y luego de ir al baño.
• No dejarlos comer alimentos de la calle. Darles comida bien cocida y taparla para que no lleguen las moscas.
• Asegurarse de que las pachas de los más pequeñitos estén bien lavadas, al igual que otros utensilios con los que comen.
• Darle más leche materna pues le ayuda a crear más defensas en su organismo y sobrevivir sin complicaciones a cualquier enfermedad.

3.    Quemaduras: más que una enfermedades son lesiones que despuntan cada temporada navideña debido al uso inadecuado de pólvora y a la falta de supervisión de los padres cuando sus hijos la administran.

A pesar de los múltiples esfuerzos de las instituciones gubernamentales competentes en el tema para evitar niños quemados cada Navidad, las familias salvadoreñas, y sobre todo los menores, continúan siendo víctimas de la pólvora. Hasta la primera semana de diciembre de este año, el Hospital Bloom reportaba cuatro casos de niños quemados en rostro, cabeza, ojos y dedos con cohetillos, pólvora china y cohete de vara.

Para el doctor Mena la única recomendación útil que evitaría niños quemados es no comprarles pólvora, pues no es un juego, sino objetos peligrosos que podrían marcar la vida de tu hijo para siempre.