El misterio detrás de una piel suave y aterciopelada, como la de un melocotón, se encuentra en una buena limpieza, hidratación y exfoliación facial. Este último punto es imprescindible para eliminar las células muertas y lograr una sedosidad inigualable, siempre y cuando se utilicen los ingredientes correctos.

Para que no busques más, aquí te presentamos las mejores recetas de exfoliantes naturales para suavizar la piel, que además nutren, limpian el exceso de grasa y refinan la textura sin lastimarte.

Exfoliante de café y aceite de rosa mosqueta

El café es un activo ideal que desintoxica los poros, desinflama y suaviza la piel, mientras que el aceite de rosa mosqueta humecta a profundidad y disminuye las irregularidades, como las cicatrices.

Utiliza este combo exfoliante mezclando una cucharada de café molido, con ½ cucharadita de aceite de rosa mosqueta, aplica y masajea durante un par de segundos. Procede a enjuagar con agua fría y repite el procedimiento cada 15 días.

Exfoliante de bicarbonato de sodio con yogur

Este dúo de ingredientes es perfecto para eliminar las células muertas, limpiar los puntos negros y combatir las molestas manchas, a fin de dar un tono uniforme y una textura de terciopelo.

Para elaborar el exfoliante, combina una cucharadita de bicarbonato de sodio y una cucharada sopera de yogur, distribuye en el rostro con movimientos ascendentes y retira al cabo de un minuto.

Exfoliante de avena y leche

La fibra y los antioxidantes de la avena favorecen a cualquier tipo de piel, pues absorben la suciedad, evitan la deshidratación y suavizan la cara, junto con la sensación calmante de la leche.

Apuesta por este exfoliante y prepáralo con 2 cucharaditas de avena finamente molida y 2 cucharaditas de leche entera. Lava como de costumbre y, al final, no te olvides de colocar una buena capa de crema facial.

Exfoliante de linaza y miel

Se trata del exfoliante predilecto para conseguir una piel de terciopelo, ya que las propiedades de la linaza suavizan y rejuvenecen la tez por excelencia, además de que la miel limpia, combate el acné y alivia el enrojecimiento.

¿Cómo hacerlo? En una olla, calienta ½ taza de agua y agrega 3 cucharadas de linaza en polvo y 2 cucharadas de miel. Cuando llegue a punto de ebullición, apaga la mezcla, espera a que enfríe y lleva a tu rostro con masajes suaves.

Exfoliante de azúcar y aguacate

Si lo que quieres es combatir la resequedad, nutrir la piel y tener ese efecto de mejillas de melocotón aterciopeladas, este exfoliante debe ser parte de tus rituales de belleza cada mes.

Todo lo que tienes que hacer es triturar ½ aguacate y agregar 1 cucharada de azúcar para obtener una pasta homogénea. Una vez que esté lista aplica en todo el rostro con movimientos circulares, permite que actúe 10 minutos y enjuaga con agua tibia.

FUENTE:  Glamour.mx

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