Llegó diciembre y con él se revitaliza nuestra esperanza y nuestro hogar. A menudo nos enfocamos en la decoración navideña, el color apropiado y las lucecitas que nos alegran la llegada a casa, luego de nuestro día. Alguna vez te preguntaste: ¿qué más puedo hacer? ¿Será la Navidad únicamente decorar y regalar? Obviamente, ¡la respuesta es un rotundo NO!
Diciembre es una época maravillosa para renovar y fortalecer nuestra fe, hacer pequeñas autoevaluaciones, verificar si cumplimos los propósitos que nos planteamos a inicio de año o si los dejamos pendientes. En fin, hay muchas cosas que podemos hacer en esta temporada; algunas en familia. Toma nota:
Es un buen momento para realizar una limpieza general. Si tienes hijos, aprovecha para enseñarles a organizar su guardarropa y sus juguetes. Cada miembro de la familia es responsable de su área personal. La mayor enseñanza que puedes darles con esta acción es el valor de la solidaridad. Si los niños no usaron un juguete durante un año o ya no les gusta y se encuentra en buen estado, dónalo. ¡Es tan sencillo regalar sonrisas a quienes lo necesitan! Y no te imaginas cuántos artículos solo están acumulados en casa.
El siguiente paso lógicamente será limpiar. Aceptémoslo, hay muchos rincones que necesitan una limpieza más profunda. Es el mejor momento para prepararnos y recibir el año con nuestro hogar ordenado, organizado y reluciente de limpio.
Si tienes jardín, llegó el momento de prestarle un poco más de atención y mejor aún en familia. Aprovecha para plantar un árbol o una planta y asigna la responsabilidad de cuidarlo a tus hijos, de esta manera aprenderán a amar la naturaleza y cuidar el medio ambiente. Si no cuentas con jardín, invierte en una linda maceta.
Hace apenas unos años, era emocionante recibir tarjetas navideñas. ¿Qué te parece si retomas este elegante detalle y le envías tarjetas o cartas por correo tradicional a tus seres queridos y amistades? Te garantizo que disfrutaras mucho escribirlas y su remitente lo agradecerá infinitamente.
¿Y si hacemos algo aún mejor por nosotros? Llama a tus amistades con quienes menos compartiste, quizá tenemos muchos a quienes no hemos visto ni saludado incluso por años… ¡Increíble cómo dejamos enfriar nuestras relaciones! El tiempo vuela, a veces ya no se nos presentará la oportunidad, hazlo y regálate un momento que no tiene precio.
Y si ofendiste a alguien, discúlpate, pide perdón y perdona. Recuerda que un corazón alegre, sin rencores, hace que tu rostro resplandezca.
Podríamos continuar compartiendo ideas, pero no quiero dejar pasar la oportunidad para invitarte a que tomes un tiempo a solas contigo… reconozcamos que vivimos en un mundo bombardeado por imágenes, fotografías en redes sociales que nos presentan “vidas felices y perfectas” y lo queramos o no, influyen en nuestro subconsciente.
Antes que el año finalice, deshazte de las toxinas mediáticas y converses con tu compañera de viaje… tu mente. Ten un diálogo sano, sin reproches, productivo y eficaz.
Para aprender a amar la vida, es necesario que te reconcilies contigo mismo, ama y agradece lo que tienes y lo que no. Ama de manera saludable para vivir bien, con presencia en el aquí y ahora, solo de esa manera podrás saborear cada minuto de tu vida.
¡Redecora! ¿Te sucede algunas veces que te aburres de un sillón o un cuadro? Llegó el momento para redecorar y no es
necesario invertir mucho dinero, a veces basta con cambiar de lugar los muebles o solo invertir en pequeños acentos de color, con cojines o alfombras. Los pequeños detalles hacen la diferencia. Si tu presupuesto lo permite, inspírate y renueva ese mueble, cámbiale color…
¡hazlo tuyo y podrás presumirlo a tus invitados.
Recuerda: eres formidable… ¡Feliz Navidad y un año 2023 espectacular!
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FUENTE: Licda. Mónica Ábrego. Consultora Internacional de Imagen y Etiqueta
E-mail: monica.abrego10@gmail.com
