Un estudio de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Yale (EEUU) encontró un vínculo entre la lectura y el aumento de la longevidad, por lo que los devoradores de libros podrían tener una mayor esperanza de vida en relación con aquellos que no leen nunca.
En esta investigación han participado 3.635 personas y los datos se dividieron en 3 grupos: personas que leen más de 3,5 horas a la semana, personas que leen menos y personas que no leen nada.
Así, hallaron que las personas que leen menos de 3,5 horas a la semana tenían un 17% menos de probabilidades de morir en los siguientes 12 años, mientras que los que leen por encima de ese umbral tienen un 23% menos de posibilidades.
Pero, además del aumento en la esperanza de vida, leer también tiene estos beneficios.
Reduce el deterioro cognitivo
Leer es muy beneficioso tanto para estimular la mente como para ejercitar la memoria. En definitiva, reduce el deterioro cognitivo, según confirma otro estudio publicado en la revista Neurology en 2013: una actividad cognitiva frecuente a lo largo de la vida, en la que puede incluirse la lectura, está relacionada con un deterioro más lento.
Los investigadores del citado estudio también detectaron una menor tasa de deterioro de la memoria en aquellas personas que habían llevado a cabo actividades mentalmente estimulantes —como leer— respecto a quienes no acostumbraban a incluir esas actividades en su día a día.
Disminuye el estrés
Se cree que el estrés contribuye en torno al 60% de todas las enfermedades y puede aumentar los riesgos de un accidente cerebrovascular —en un 50%— y enfermedades del corazón —en un 40%—, según recoge Muy Interesante. Y es que, aunque con el ritmo de vida actual resulta imposible eliminar todo el estrés, un estudio de la Universidad de Sussex (Reino Unido) sostiene que la lectura puede reducir un 68% los niveles de estrés, incluso más que escuchar música o ir a pasear.
Ayuda a conciliar el sueño
Leer también ayuda a dormir por las noches: un rato de lectura puede hacer que alcances un estado de relajación a través del cual el cerebro libera estrés y se oxigena antes del descanso.
El estudio publicado en 2016 por la revista Social Science & Medicine confirma que leer un libro antes de dormir es mucho más beneficioso que utilizar un smartphone, que empeora la eficiencia del sueño, aumenta la perturbación y la disfunción durante el día.
Mejora las habilidades sociales y te hace más inteligente
Según una investigación publicada en 2013 en la revista Science, las personas que leen ficción pueden tener una mayor capacidad de entender que las creencias, los deseos y los pensamientos de las personas son diferentes a los suyos, es decir, tienen más empatía. “Lo distintivo de los seres humanos es que hacemos intercambios sociales con otras personas —con amigos, con parejas, con niños— que no están preprogramadas por instinto. La ficción puede aumentar y mejorar nuestra experiencia social", explica el líder del trabajo Keith Oatley en unas declaraciones publicadas por Muy Interesante.
Asimismo, leer mejora el vocabulario y está probado que los niños de 7 años con mejores habilidades de lectura obtienen calificaciones más altas en los tests de Cociente Intelectual que aquellos con habilidades de lectura más débiles, según un estudio de Child Development publicado en 2014.