Todas deseamos un cutis lindo, radiante, sin imperfecciones y que luzca fresco y juvenil. Sin embargo, los cambios hormonales, el ritmo de vida y los factores ambientales, producen transformaciones en la piel.

Uno de los problemas de la piel más frecuentes en la población femenina es el melasma. Se trata de una enfermedad crónica y asintomática que se presenta en forma de manchas oscuras de color marrón o café, de diferente intensidad y distribución irregular o regular.

Según el Dr. Rafael Quezada especialista en medicina estética y cuidados de la piel, el melasma suele localizarse de manera simétrica en el rostro: la frente, mejillas, dorso de la nariz, labio superior y a veces el cuello. Además, Quezada explica que las causas son de origen desconocido, pero existen factores que aumentan la probabilidad de su aparición, ya que activan descontroladamente las células encargadas de la pigmentación de la piel: los melanocitos.

Algunas causas

La radiación ultravioleta UV, ser de piel morena, factores genéticos, hormonales, nutricionales y cosméticos; la luz visible y algunos fármacos; también puede considerarse idiopático, es decir sin causa aparente.

“Afecta a todas las razas, pero se observa con mayor frecuencia en las zonas tropicales y predomina en los países latinoamericanos. Muestra mayor predilección por mujeres de mediana edad, principalmente de piel morena, además ocurre en el 66% de las embarazadas y disminuye o desaparece hasta el parto; en el 33% persiste por tiempo indefinido”, explica el especialista.

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¿Cómo evitar el melasma?

• La principal recomendación es que te protejas físicamente contra la luz solar, utilizando sombrero o sombrilla cada vez que te expongas al sol.
• Debes evitar los cosméticos irritantes que pueden provocar reacciones adversas en cualquier punto de la piel.
• Utiliza filtros solares con factor de protección solar (FPS) entre 30-50 diariamente.
• No todo el maquillaje es dañino, este problema estético puede superarse con un maquillaje que se adecúe al tono correcto de tu piel y utilizarlo como camuflaje.

“A la fecha con toda la tecnología disponible no existe un tratamiento eficaz, los productos que se tienen brindan mejoría; pero la recidiva (reaparición) es la regla. Uno de los principales obstáculos es el apego al tratamiento, por eso es importante educar al paciente y la modificación de sus hábitos”, recomienda Quezada.

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Estas manchas se suelen relacionar con las hormonas femeninas estrógeno y progesterona, por eso es común asociarlas con mujeres embarazadas y con aquellas que están tomando la píldora anticonceptiva o una terapia hormonal para la menopausia.

Fuente:
Rafael Quezada Galdámez

Medicina Estética y cuidados de la piel
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