La salud mental puede definirse como la capacidad de amar, disfrutar, trabajar y tolerar-tolerarse a uno mismo y a los demás. Para cuidarla y evitar su deterioro debe atenderse a determinados aspectos de la vida diaria. El Programa de Actividades Preventivas y de Promoción de la Salud (PAPPS) recomienda los siguientes consejos.
Si nuestra mente se ve dominada por el enojo, desperdiciaremos la mejor parte del cerebro humano: la sabiduría, la capacidad de discernir y decidir lo que está bien o mal.
Dalai Lama
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Recomendaciones
- Aprender a estar en paz contigo mismo. Conoce lo que puedes y no puedes cambiar de ti, incluyendo el aspecto de tu cuerpo. Esto quiere decir, aceptar nuestras capacidades y nuestras limitaciones.
- Resistirse al entorno consumista. Gastar más en los deseos que en las necesidades puede generar decepción y ansiedad.
- Dedicar parte de tu actividad a labores solidarias con los demás. Pueden darte mejores satisfacciones que algún trabajo remunerado.
Dieta y su relación con la salud mental
- La dieta debe ser variada, sana, agradable y adecuada en calorías para mantener un peso adecuado.
- Debes reducir el consumo de grasas animales, de azúcares refinados y dulces, evitando también un exceso de bebidas con cafeína y el consumo excesivo de alcohol.
- Es muy recomendable respetar los horarios para las comidas y tomarse el tiempo necesario para disfrutar de la alimentación.
- Has lo posible para disfrutar y cuidar las relaciones en todas las ocasiones en que se pueda comer en familia.
Actividad física y mejor salud mental
- Realizar ejercicio físico de forma regular aumenta la esperanza de vida y ayuda a mantener la salud física y mental.
- Integra la actividad física en tu vida cotidiana: camina, sube escaleras, pasea...
- No se trata de correr un maratón todos los días, tan solo realizar unos 30 minutos de actividad física moderada, la mayoría de los días de la semana, es suficiente.
Mejor sueño = salud mental
- Debes tener un buen hábito de sueño, acostándote y levantándote a la misma hora. No acostumbre a desplazar más de 2 horas el momento de levantarse los fines de semana
- Para un adulto es suficiente dormir 7-8 horas diarias, aunque las horas que precisa cada persona para sentirse descansado varían entre individuos.
- Es bueno tener una rutina relajante al dormir (leer, escuchar música, tomar una ducha...), evitando situaciones que le activen o impliquen emocionalmente.
- Utiliza la cama y el dormitorio solo para dormir. Trata de relajarte antes de conciliar el sueño, no veas la TV, ni escuches la radio o pases con tu smartphone.
- Tu habitación debe tener un ambiente para descansar: oscura, silenciosa, ventilada y con temperatura adecuada.
- Si estás acostumbrado a tomar una siesta, solamente debe durar 30 minutos.
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¿Cuándo buscar ayuda de un profesional para mejorar mi salud mental?
- Los sentimientos de malestar llegan a desbordar, haciendo sentir que no se disfruta de la vida suficientemente.
- Cuando se aprecia que nuestro estado de salud no es adecuado o aparecen síntomas (mareos, dolores de cabeza, vértigos...) que no nos explicamos y que antes no se padecían.
- Si sientes el trabajo como una sobrecarga, cada vez mayor. Cuando existen conflictos en el hogar que ponen en peligro la estabilidad de la familia.
- Tras la muerte o la pérdida de un ser querido, existen dificultades para "seguir adelante".
- Si existe consumo excesivo de alcohol o consumo de otras drogas que interfieren con la propia vida.