La Organización de Consumidores y Usuarios se ha preocupado de analizar 15 marcas de pizzas refrigeradas. ¿El veredicto? Exceso de sal, grasas e hidratos de carbono y defecto de rigor en el etiquetado a la hora de expresar los porcentajes de ingredientes, la información nutricional y el tipo de grasas.
Tres porciones grandes de pizza barbacoa (Calorías: 690; Grasas: 30 gramos; Hidratos de carbono: 75 gramos). “La base de la pizza tradicional está elaborada con harina de trigo, agua, levadura, sal y aceite de oliva. Sin embargo, las pizzas que encontramos en supermercados y cadenas de comida rápida contienen más grasa (no siempre de oliva), azúcares y aditivos”, señala a nutricionista Vanessa Buitrago. Los ingredientes principales son múltiples: carnes, pescados, verduras, quesos… También es común que lleven alimentos ricos en grasas saturadas como salchichón, beicon, salami o salchichas. “Estos ingredientes aumentan el aporte calórico y además hacen más pesadas las digestiones”, anota. El queso es uno de los elementos estrella de la pizza. Pero hay que saber que se funde tan bien porque contiene una alta cantidad de materia grasa.
Vanessa Buitrago nos da consejos para elegir la opción más saludable tanto fuera de casa como a la hora de comprar. “Hay que leer su etiqueta y decantarse por las que tengan menor cantidad de grasas y aditivos, así como de masa ligera y sin bordes rellenos. Aconsejaría evitar ingredientes como las salchichas, el salami, el beicon o las salsas”. A la hora de pedir a domicilio es muy importante controlar el tamaño de la ración. No es lo mismo comerse una porción que cinco. ¿Qué tal tres?
Veredicto
La especialista Terika Uriol, con su propio centro de nutrición en Madrid, compara pues el clásico menú de bocadillo de hamburguesa vacuna con tomate, pepinillo, cebolla, lechuga, queso y salsas, con las tres porciones de pizza barbacoa, y estas son sus conclusiones.
1. Si está a dieta, es preferible la pizza. Tiene menos calorías y menos grasa. Especialmente si la hamburguesa va con patatas fritas medianas (500 calorías). ¿Porque quién es capaz de ir al McDonald's o al Burger King y optar por la ensalada?
2. Si quiere que las razones de salud sean las que pesen en su decisión, también debería seleccionar la pizza, con menos grasas saturadas que la hamburguesa. En cuanto al valor proteico, ambas opciones lo comparten: la clave está en el queso.
3. En caso de querer moderar el consumo de sal o tener problemas de retención de líquidos, ambos alimentos llevan mucho sodio, aunque en la pizza la cifra se reduce a la mitad.
4. Las grasas son más o menos las mismas, si a la hamburguesa no se suma una ración de patatas.
5. ¿Y para los niños? La pizza es mayor fuente de calcio.
6. Las pizzas de fast food más saludables son las de jamón York, vegetal o de la huerta, pues reducen a la mitad su contenido graso. Las de cerdo, carne picada, beicon o doble base de queso son las que salen peor paradas. En el caso de la hamburguesa, optar por una de pollo o pavo será siempre más beneficioso para el organismo.
Tomado de elpais.com