La fibromialgia es un síndrome que produce dolor generalizado en todo el cuerpo y aumenta la sensibilidad en las articulaciones, músculos, tendones y otros tejidos blandos, este mal podría ser provocado por alteraciones en el funcionamiento del sistema nervioso. En un 85% de los casos los pacientes desconocen la enfermedad hasta el momento de su diagnóstico.
Por cada veinte mujeres que sufren fibromialgia, sólo un hombre la padece. No se conocen las razones precisas del porqué de esta diferencia, sin embargo, especialistas sugieren que el sexo femenino tiene mayor sensibilidad al dolor, mientras que otros piensan que podría haber algún componente hormonal involucrado, lo cual no se ha confirmado aún.
Se estima que en el mundo esta enfermedad podría afectar hasta un 6% de la población general.
Los síntomas asociados al padecimiento se pueden confundir con otras enfermedades. El signo más característico de esta enfermedad es la activación de múltiples puntos de dolor con aumento de la sensibilidad al tacto. A esos puntos de dolor también se le suma la rigidez matutina que se presenta en más del 76% de los pacientes, alteraciones del sueño y fatiga.
Según el Colegio Americano de Reumatología, de las personas que padecen esta enfermedad:
- El 100% sufren dolor muscular.
- El 96% sufre fatiga.
- El 86% reporta insomnio.
- El 72% tiene dolor en las articulaciones.
- El 60% podría sentir dolor de cabeza.
- El 42% tiene calambres en las piernas.
- El 20% podría tener depresión mayor.
La eficacia del tratamiento en pacientes con fibromialgia
Los pacientes con esta enfermedad deben ser tratados de manera integral, incorporando el uso de medicamentos específicos, actividad física, masajes y estiramientos regularmente a la terapia.
A la hora de elegir un medicamento para controlar el dolor, el médico debe considerar una opción que le permita al paciente lograr el alivio al tiempo que recupera la funcionalidad.
Lyrica de Pfizer, fue el primer tratamiento aprobado por la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) para el tratamiento específico de la fibromialgia y es recomendado por la Asociación Americana del Dolor, gracias a su capacidad de controlar el dolor y modular la función nerviosa.
Importante destacar que el diagnóstico de la enfermedad debe iniciar por la identificación los síntomas y signos característicos de la enfermedad y descartar otras enfermedades que pudieran tener similitudes.
La mayoría de los pacientes con fibromialgia dice haber sentido dolor generalizado durante tres meses o más, por lo que una consulta temprana y oportuna al médico podría marcar la diferencia en la recuperación y la mejoría en la calidad de vida.