Ver a tu pareja mientras tienen relaciones es uno de los afrodisiacos más grandes, las formas de su cuerpo, la cercanía y el contacto entre ambos, sin embargo, hay parejas que prefieren consumar su amor con la luz apagada y con esto desatar sus fantasías.
Cuál eliges con tu pareja, ¿sexo con la luz apagada o encendida? La sexóloga Sandra Lustgarten, explica que la decisión de hacerlo con iluminación o en la oscuridad, se esconden la rutina de una pareja, costumbres y preferencias; en ocasiones la relación se acompaña de complejos, inseguridades y miedos, pero también pasión, lujuria y fantasías.
“El temor de mostrar el cuerpo cuando alguno de los miembros tiene baja autoestima, es el peor de los consejeros para estimular el deseo sexual. La visión es uno de los puntos erógenos sensoriales más activos en el varón como en la mujer, así que mostrar el cuerpo es el mejor estímulo para provocar la excitación. Ver lo que se está haciendo y sintiendo, es lo ideal”, explicó Lustgarten.
Este fenómeno ha sido estudiado por diferentes especialistas, los científicos italianos de la Universidad de Siena, descubrieron que las luces brillantes incrementan los niveles de testosterona en los hombres y, por lo tanto su deseo por el sexo aumenta con la luz encendida.
Mientras que con la luz apagada se cree que es posible alcanzar el máximo placer, porque es más fácil entregarse a la experiencia sexual y dejarse llevar. La pareja construye fantasías sexuales y se sienten más motivados a cumplirlas con poca luz. La libertad aumenta y es posible jugar con reflejos y sombras.
Otra opción ideal para lograr un punto medio entre ambas, es que enciendas velas, además de ser un recurso muy romántico, puede aportar mayor pasión al encuentro. Te permite ver y sentir lo suficiente para que te sientas segura, va invadir tu habitación de una atmosfera mágica rodeada de erotismo y sexualidad insuperables.