El ser mamá representa ser una súper mujer que a diario realiza múltiples actividades, sin embargo, entre este ajetreo a veces olvidas cuidarte a ti mismas.
Por eso, queremos darte el regalo perfecto para el día de la madre: ¡La buena salud!
Sigue estos cinco pasos a mejorar su salud física y mental y disminuir el riesgo de ciertas enfermedades:
1) Visita a un profesional de la salud para recibir chequeos regulares y exámenes preventivos.
Prevención del cáncer de mama, detección de VIH, citología, mamografía, colesterol y triglicéridos... Todos estos exámenes pueden cambiar tu vida.
2) Mantente activa.
La actividad física puede prolongar tu vida:
- Reducir el riesgo de enfermedad cardíaca, accidentes cerebrovasculares, hipertensión, los niveles de colesterol poco saludables, tipo 2 diabetes, síndrome metabólico (un grupo de factores de riesgo que impida una variedad de enfermedades crónicas, cáncer de colon, cáncer de mama, caídas, depresión y otras enfermedades
- Reducir el riesgo de fractura de cadera, cáncer de pulmón, cáncer de endometrio
- Mejorar la calidad de sueño y densidad ósea
- Reducir el tamaño de tu cintura y ayudan a mantener un peso saludable.
Ser físicamente activa no significa tener que levantar pesas en el gimnasio. Pasear a tu perro, hacer caminatas, andar en bicicleta o bailar puede tener grandes beneficios para tu salud.
3) Comer más sano.
Actividad física y alimentación saludable van de la mano. Comer una dieta saludable y actividad física regular puede ir un largo camino en la reducción de su riesgo de enfermedad cardíaca, tipo 2 diabetes, y para ayudar a administrar un peso saludable.
Consumir grasas saludables que ayudan a disminuir el colesterol y reducir el riesgo de enfermedades del corazón como el aceite de oliva, aguacates, y más nueces.
Límite de grasas poco saludables que contribuyen a la hipercolesterolemia y aumenta el riesgo de enfermedad cardíaca. Grasas poco saludables son las grasas saturadas (cortes de alto grado en grasas de carne, aceite de Palma, y manteca de cerdo) y Trans grasas (encuentran en productos horneados empaquetados comercialmente para ayudar a prolongar la vida útil).
4) Aprende a manejar el estrés.
El estrés es parte de la vida cotidiana.
Las tres formas más importantes de estrés son de rutina o el estrés de cada día traído sobre presiones de trabajo, familia y responsabilidades diarias; estrés provocado por un repentino cambio negativo tales como pérdida del empleo, divorcio o enfermedad; y estrés postraumático como consecuencia de un accidente importante, desastre natural o guerra. Todos estos pueden afectar su salud física y mental.
Técnicas comunes de gestión de estrés como yoga, gestión del tiempo, y el ejercicio regular se ha demostrado para ayudar a. Así, Asegúrese de buscar ayuda de un proveedor calificado de salud mental si usted siente que no puede venir, están abrumados, tiene pensamientos suicidas o está usando drogas o alcohol para hacer frente a.
5) Cuida tu piel.
Tú piel habla por ti, te recomendamos que tomes por lo menos 2 litros de agua a diario para siempre estar hidratada y humectar tu piel. De esto dependerá qué tan visibles sean los signos de la edad.