Los guisantes, la legumbre con una presentación más diminuta en estado , contienen múltiples proteínas, vitaminas e hidratos básicos para nuestra .
Parece mentira que un tan diminuto y en apariencia insignificante como es el guisante pueda ser de tantas y tan buenas propiedades. Pero así es: nos encontramos ante una de las legumbres más completas de nuestra tierra y un lateral perfecto (y más ahora) de cualquier plato, sea o pescado.
Lo más llamativo sin duda es su composición: contiene tanta agua como el propio cuerpo humano, por lo que su consumo hidrata de forma efectiva. También presume de un alto contenido en vitaminas como la antioxidante C -que además ayuda a prevenir catarros y cicatrizar heridas-, la beneficiosa para la vista A o el ácido fólico, que ayuda a generar glóbulos rojos por lo que previene la anemia. También recientes estudios asocian esta vitamina del grupo B a la prevención del cáncer de colon y del cuello del útero.
También aporta minerales, en especial hierro para evitar el estrés y aportar energía unido a los carbohidratos y su gran aporte calórico, potasio para eliminar toxinas de nuestro cuerpo y fósforo que estimula el cerebro.
A todo esto hay que añadir que son fuente de fibra que ayuda a mejorar el tránsito digestivo, por lo que ayudan a prevenir el cáncer intestinal, así como su bajo contenido en grasas, siendo éstas de calidad y beneficiosas para la salud.
Sin duda, los guisantes se van a convertir en tu nuevo aliado contra los agentes dañinos tanto externos como internos y sustituirán a las patatas fritas o la típica ensalada sencilla como acompañamiento de tus platos principales. Una opción rica, sencilla de preparar y una pequeña gran arma para tus defensas.
Fuentes: informe21.com y esquire.es