Sin lugar a dudas, el ejercicio trae múltiples beneficios a quienes lo practican con regularidad: Ayuda a evitar problemas en el corazón, la diabetes y reduce en un 50% la probabilidad de tener cáncer y en un 30% de morir prematuramente.
Aunque una persona haga una rutina de alta exigencia, no significa que esté “en forma”, o por lo menos así lo explica el preparador español, Juan Francisco Marco.
Este profesional agrega que es mucho más importante valorar la rutina en términos cualitativos que cuantitativos; es decir, más calidad que cantidad.
Marco explica que “una persona goza de un estado de forma bueno cuando se somete a un chequeó médico y le sale todo bien, lleva una alimentación adecuada, psicológicamente es estable”.
Dicho en otras palabras, la persona estará saludable si siente un bienestar general que todos sus sistemas, músculos, huesos y el metabolismo trabajen de forma óptima.
¿Cómo está la "persona en forma"?
El Departamento de Salud y Servicios Sociales de Estados Unidos (HHS, por sus siglas en inglés) define el estar en forma como "la habilidad de poder realizar una actividad física a diario, de manera vigorosa y atenta, sin sufrir una excesiva fatiga".
Bajo este concepto, el preparador Marco indica cuales son los parámetros para determinar si una persona de verdad está en forma.
- Grasa corporal: En los hombres hombres debe oscilar el 17%; en mujeres, 24%.
- Flexiones: La mujer debería ser capaz de realizar 20 y el hombre, 30.
- Test de Cooper: Mide la distancia recorrida en un lapso de 12 minutos: la mujer debería recorrer 1900 metros y el hombre 2200 metros.
- Flexibilidad: Ambos sexos deberían ser capaces de tocar los dedos de los pies sin tocar las rodillas.
En conclusión... tú, ¿cómo estás? ¿En forma o saludable?