
Por Javier Maldonado
Un niño y un adulto en el sur de EEUU tenían el común y letal denominador de no estar vacunados contra el sarampión, y eso los llevó a que no pudieran resistir los embates del virus y que les provocara la muerte. Estos dos pacientes son por ahora lados primera víctimas mortales de un brote de sarampión que comenzó en el estado de Texas y que se ha extendido a al menos nueve estados, según un reporte de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Hasta ahora los CDC tienen registros de contagios de sarampión en menores de 17 años, cuyos casos integran un brote que ha alcanzado dimensiones no vistas en más de una década. Los estados donde se han reportado los contagios son Alaska, California, Georgia, Kentucky, Nueva Jersey, Nuevo México, Nueva York, Rhode Island y Texas.
El brote de sarampión se da en medio de un resurgimiento del movimiento antivacunas en la política estatal, con más de 20 proyectos de ley actualmente en consideración para aligerar las regulaciones sobre las vacuna.
Pese a esa resistencia los médicos insisten que la única manera de combatir esta enfermedad es vacunándonos.

El pasado 3 de marzo la Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió una alerta epidemiológica debido al aumento de casos de sarampión en Argentina, Canadá, Estados Unidos y México.
"Si bien la región fue reverificada como libre de sarampión en 2024, el sarampión sigue siendo una amenaza en la región, debido a su continua circulación en otras regiones del mundo lo que aumenta el riesgo de importación a través de viajeros, y a la existencia de grupos de población no inmunizados que continúan siendo vulnerables. De los 268 casos confirmados en 2025, un 69% corresponden a personas mayores de 5 años", indicó la OPS.
Europa y Asia Central también han alertado su preocupación por el incremento de casos de sarampión. Indican que desde 2024 la cifra supone 127.350 caso, la más alta reportada en los recientes 25 años.
Más del 40 por ciento de todos estos casos son niños menores de cinco años, y la mitad han requerido hospitalización; según datos preliminares recibidos hasta el 6 de marzo de 2025, se han registrado 38 muertes relacionadas.
"El sarampión ha vuelto, y es una llamada de atención. Sin tasas altas de vacunación no hay seguridad sanitaria. Estamos dando forma a nuestra nueva estrategia sanitaria regional para Europa y Asia Central y no podemos permitirnos perder terreno. Todos los países deben redoblar sus esfuerzos para llegar a las comunidades que no están suficientemente vacunadas. El virus del sarampión nunca descansa, y nosotros tampoco podemos hacerlo", advirtió el martes el director regional de la OMS para Europa, el doctor Hans P. Kluge, según declaraciones que recoge la agencia Europa Press.
La región alcanzó un pico en 1997, cuando identificó 216.000 casos, y llegó a un mínimo en 2016 con 4.400 casos; sin embargo, se observó un resurgimiento en 2018 y 2019 (89.000 y 106.000 casos, respectivamente) y, tras un retroceso en la cobertura de inmunización durante la pandemia de Covid-19, los casos han aumentado "significativamente" en 2023 y 2024.
"Los países que no tienen brotes actuales de sarampión deben estar preparados, entre otras cosas identificando y abordando las lagunas en la inmunización, desarrollando y promoviendo la confianza pública en las vacunas y manteniendo sistemas sanitarios sólidos", añadió Kluge.
¿Cómo nos contagiamos?
El sarampión es una enfermedad muy contagiosa causada por un virus que se encuentra en la nariz y en la garganta de un niño o adulto infectado. Cuando una persona con sarampión tose, estornuda o habla, las gotitas infectadas se dispersan en el aire, donde otras personas pueden inhalarlas. Las gotitas infectadas pueden permanecer en el aire durante aproximadamente una hora.
Las gotitas infectadas también pueden depositarse sobre una superficie, donde pueden permanecer activas y esparcirse durante varias horas. Si te tocas la boca o la nariz con los dedos o te refriegas los ojos luego de tocar una superficie infectada, puedes contraer el virus del sarampión.
El sarampión es muy contagioso desde casi los cuatro días anteriores hasta los cuatro días posteriores a la aparición del sarpullido.

- Los síntomas
Aparecen entre 10 y 14 días después de la exposición al virus. Los signos y los síntomas del sarampión generalmente son:
Fiebre
Tos seca
Mocosera
Dolor de garganta
Ojos inflamados (conjuntivitis)
Manchas blancas diminutas con centro blanco azulado y fondo rojo dentro de la boca, en la cara interna de la mejilla, también denominados manchas de Koplik
Sarpullido constituido por manchas grandes y planas que generalmente se funden entre sí - Complicaciones
Diarrea y vómitos
Infección de oído
Bronquitis, laringitis e inflamación de las vías respiratorias
Neumonía
Encefalitis
Durante el embarazo esta enfermedad puede provocar un parto prematuro, bajo peso del bebé al nacer o la muerte del feto.




Este artículo se produjo con contribuciones de VidaSana, France 24, CNN, OPS, OMS, Mayo Clinic y Europa Press
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