Ser mamá por primera vez es algo hermoso, sin embargo, nadie está preparado en su totalidad para serlo, y mucho menos para no equivocarse. Por ello, te enlistamos los 10 errores más comunes de las mamás primerizas.
- CONSEJEROS Y GUÍAS
Tomar guía o consejos de mamás con experiencia no es negativo, sin embargo, serán tantos los consejos, sugerencias y hasta indicaciones bien intencionados que pueden influir en decisiones transcendentales y que pongan en riesgo a tu hijo. Por ello, es mejor, acudir con el pediatra para cualquier duda sobre tú bebé, recuerda que cada organismo es diferente y lo que le ocurre a uno no siempre es lo que va a pasar. Más vale el consejo de algún experto, sobretodo en el caso de enfermedades.
- MIEDO A SER MAMÁ
A la par al escuchar tantas historias, experiencias y ver cómo otras madres más experimentadas se hacen cargo de sus hijos, el sentimiento de “no puedo” o “no seré tan buena como ellas” puede inundar tu cabeza, ante esto sugerimos que no dudes de tu capacidad, el tiempo te irá perfeccionando.
- BEBÉ “BURBUJA”
La mayoría de las madres primerizas caen en este error, crear un entorno “perfecto” y esto incluye el no dejar que otros toquen al bebé por miedo a que lo enfermen o le hagan daño. Debes tener claro, que es inevitable que algún día se enferme y que como todo ser humano necesita del contacto humano para conocer el mundo.
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- HIGIENE EXCESIVA
Un poco ligado al tema anterior, es común que las mamás lleven al extremo la limpieza de los objetos que utiliza el bebé, si bien, es cierto, que los primeros tres meses de vida es bueno esterilizar todo lo que toque el recién nacido, después de ese tiempo puedes relajarte, recuerda que para crear defensas los niños tienen que ensuciarse de vez en vez.
- BAÑO DIARIO
Es común que te digan que es necesario bañar a diario al bebé, que les ayuda a dormir, a estar más sanos, sin embargo, debes saber que en realidad no es tan recomendable ya que su piel es aún muy delicada y de esta manera son más propensos a rozaduras y resequedad. Lo ideal es tres veces a la semana.
- ABRIGARLOS EN EXCESO
Si bien, es aconsejable evitar cambios bruscos de temperatura, esto no quiere decir que los pequeños deban estar todo el tiempo con 20 mil cobijas. Si en casa la temperatura promedio es de 20 a 22 grados centígrados no es necesario que traiga sombrero, guantes, suéter y cobijas. Lo mejor es revisar que no tenga ni manos ni pies fríos o poco amoratados, igualmente, ver si está sudando del cuello y la cabeza es que tiene calor.
- CASA SILENCIOSA
Otro error muy usual entre las mamás primerizas es evitar el ruido a la hora que el bebé descansa. Los recién nacidos deben adaptarse al sonido regular del hogar y a comenzar a relacionar luz de día y luz de noche para crearles un ciclo de sueño normal. Si tienes una casa silenciosa en un futuro el bebé podrá sobresaltarse ante cualquier ruido y no dormir correctamente.
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- CORTE DE CABELLO
La idea de cortar el pelo o rapar a un bebé para que el pelo crezca “más fuerte o tome forma” es un mito. Antes del año el tipo de pelo del bebé no es “definitivo”, por ello, raparlo sólo resta calor corporal a la cabeza.
- NO PEDIR AYUDA
Muchas mujeres piensan que es un signo de debilidad sentirse cansadas o agotadas durante los primeros meses del bebé, o incluso cuando son más mayores. Hacerse la fuerte no sirve de nada, por el contrario tus cuidados pueden ser de menor calidad porque necesitas dormir, comer.
- COMIDA A SUS HORAS
No deben pasar más de tres horas sin que un bebé coma, si es el tiempo adecuado sin embargo, cuando das lactancia materna la regla no es esa, es a “libre demanda”, si el bebé pide cada hora hay que darle, es normal. Ellos saben cuando tienen hambre y los estrictos horarios de comida pueden en ocasiones dejar con apetito al bebé.
Vía | Mujer StarMedia