Te contamos de los procesos químicos que acaban por dejar huella en tu piel. Control es la clave, pero también hay tratamientos de apoyo.
La ansiedad, la falta de sueño o bien los horarios excesivos de trabajo son cada vez más comunes en las sociedades modernas. Por supuesto, esa falta de equilibrio deja huella en nuestra piel y especialmente en nuestro rostro.
El Dr. Rafael Quezada, especialista en la estética de la piel, explica que el estrés genera altos niveles de la hormona cortisol, que puede derivar en cuadros como el acné, pero también en pieles opacas y con poros dilatados que dejan en evidencia las líneas de expresión. El ejercicio o actividad física es clave para controlar estos niveles, ya que “ayuda a liberar sustancias como las endorfinas, que ayudan al bienestar físico y mental, y regula las actividades metabólicas de nuestro organismo”, apunta.
Por otra parte, el sueño ayuda a liberar hormona del crecimiento y para descargar los niveles de toxinas que se acumulan en nuestro cuerpo, y para dar un tono vivaz a nuestra piel. La clave está en la organización de tu tiempo para equilibrar el trabajo, la vida personal y el descanso diario.
De vanguardia
Quezada afirma que uno de los tratamientos más efectivos para mejorar la apariencia de la piel cansada es la aplicación de Luz Pulsada Intensa (IPL) o fototerapia, que se realiza en sesiones cada tres semanas.
Este tratamiento revitaliza el colágeno y de esta manera devuelve el brillo natural a la piel, como un efecto de rejuvenecimiento. También están disponibles las terapias con microagujas (Microneedling-Dermapen), que implica una hidratación profunda con micronutrientes reparadores; o bien la aplicación de materiales de relleno para afinar la templanza del rostro, como la toxina botulínica.
"Un sueño reparados disminuye la presencia de líneas de expresión; mejora el drenaje linfático y también el proceso de reparación celular", Dr. Rafael Quezada
Mucho ojo
Quezada afirma que otros problemas cutáneos preexistentes que pueden agravarse debido al estrés son el acné, la rosácea y la dermatitis seborreica.
Recomendaciones
- En todos los casos, los especialistas recomiendan el uso diario de protector solar,para ayudar a reducir el estrés de la piel.
- Una dieta con alimentos ricos en antioxidantes: frutas, verduras y suplementación con oligoelementos (minerales), si es posible.
- Es importante elaborar junto a tu doctor, un plan terapias en cabina, así como seguimiento de los tratamientos en casa.
- Haz deporte y empieza una rutina diaria como empezar a caminar todos los días
Fuente:
Rafael Quezada
Médico Estético
rafaelquezada.com