Cada 1 de Diciembre se conmemora el día mundial de la lucha contra el SIDA y la campaña de este año, denominada “Mi salud, mi derecho” #myrighttohealth, está enfocada al derecho a la salud que todas las personas tienen, sin importar lugar, raza, sexo o condición social o económica.
El objetivo de la campaña es concientizar sobre el nivel de importancia que tiene el derecho a la salud y la labor que deben cumplir las instituciones encargadas para brindar una atención especializada y de alta calidad accesible para todos. Además, fomentar la racionalización sobre la necesidad de trabajar en conjunto para seguir con los procesos de evolución.
Se pretende que una de las maneras para acabar o disminuir la epidemia de SIDA, depende, en un alto porcentaje, al acceso que tengan las personas a un centro de atención médica.
En los últimos años se ha observado un avance considerable en los procesos y los tratamientos sobre el VIH. “En 2000, solo 685 000 personas que vivían con el VIH tenían acceso al tratamiento antirretrovírico. En junio de 2017, alrededor de 20,9 millones de personas tenían acceso a esos medicamentos vitales”, de acuerdo al informe que presenta ONUSIDA.
Parte de la superación obtenida se debe a personas que cumplen su rol de líderes y motivadores de grupos para que actúen en función del beneficio de las demás personas respaldados por un compromiso económico y financiero.