Las mujeres con este síndrome se excitan fácilmente sin tener un estímulo previo.
El rarísimo Síndrome de Excitación Sexual Persistente es un trastorno que solo afecta a mujeres y se manifiesta con deseo sexual sin un estímulo previo.
Aunque se cuentan menos de mil casos en el mundo, la enfermedad es aún un tabú, debido a que “genera sentimientos de vergüenza o culpa, ansiedad y angustia personal e incluso puede derivar en un caso de depresión”, asegura Francisca Molero, directora del Instituto de Sexología de Barcelona.
El Síndrome de Excitación Sexual Persistente fue documentado por primera vez por las investigadoras Sandra Leiblum y Sharon Nathan en 2001. Cabe destacar que no está relacionado con la hipersexualidad, también conocida como ninfomanía o satiriasis.
Causas
El caso más conocido fue el de Michelle Thompson, una estadounidense que afirma tener cerca de 300 orgasmos al día. Con tan pocos casos diagnosticados, las causas se han asociado al uso de algunos antidepresivos, estrés, irregularidad en los nervios sensoriales, el caso es frecuente en la posmenopausia o en aquellas pacientes que siguen tratamientos hormonales.