Mantener niveles adecuados de vitamina D favorece la salud ósea y contribuye a fijar el calcio en los huesos, mientras que un déficit de este micronutrientes es un factor de riesgo para sufrir fracturas vertebrales, según han explicado especialistas que han participado en el XV Encuentro Nacional de Salud y Medicina de la Mujer (SANEM15) de Madrid. Las vitaminas D y K son necesarias para mejorar la absorción y fijación del calcio en los huesos
En muchos países, sin embargo, el consumo de vitamina D no alcanza los mínimos recomendados, y a consecuencia de esto aumenta la aparición de osteoporosis y de enfermedades cardiovasculares y metabólicas en las personas mayores de 50 años, especialmente en las mujeres.
Un reciente estudio que se publicó en enero en European Journal of Clinical Nutrition reveló que el consumo de leche enriquecida en calcio reducía la pérdida de masa ósea en la espina dorsal en las mujeres sanas posmenopáuisicas. Pero para mejorar la biodisponibilidad del calcio, así como a su absorción y fijación en los huesos, es necesario ingerir también la cantidad diaria recomendada de vitaminas D y K.
Es importante, además, tener en cuenta que el calcio que contienen los alimentos no siempre es asimilado por el organismo de la misma forma, porque casi todos los minerales presentan interacciones con otros nutrientes, lo que en ocasiones favorece su absorción, pero en otras puede hacer que sea eliminado sin llegar a aprovecharse. Así, el organismo absorbe el 32% del calcio de la leche, el 21% del de las almendras, y el 17% el de las legumbres, por ejemplo. Por ello es tan importante que la población siga una dieta que aporte suficiente calcio y vitaminas D y K, además de practicar ejercicio de forma regular.
Fuente:.webconsultas.com