Todos la hemos padecido en algún momento de la vida, sin duda alguna, la conjuntivitis es la enfermedad más común de los ojos pues es una de las más contagiosas y su cuidado requiere, no solo la ayuda de un especialista y medicamentos, sino que el que la padece contribuya a frenar su propagación.
Síntomas
La conjuntivitis es una inflamación de las membranas superficiales del ojo, se caracteriza por picazón en los ojos, inflamación de la parte interior de los parpados y aparecen secreciones espesas y costras en las pestañas, además, la luz es molesta cuando se tiene este tipo de afección ocular. Sus causas son diversos e incluyen golpes, contacto del ojo con sustancias irritantes, virus, alergias bacterias. No es grave pero tampoco debe descuidarse: las complicaciones que involucran a la córnea (querato-conjuntivitis) pueden causar serias molestias durante meses.
Durante la enfermedad los niños no deben ir a la escuela o al jardín. Sería ideal que los adultos tampoco concurrieran a sus trabajos, pero si esto se hiciera imprescindible deben extremar recursos para evitar el contacto físico directo o indirecto con sus compañeros.
Lo que está en nuestras manos
Si se tienen los síntomas antes mencionados, lo ideal es consultar con un oftalmólogo y realizar las siguientes acciones:
- No tocarse los ojos o frotarlos con los dedos.
- Lavarse las manos con frecuencia usando agua tibia y jabón.
- Lavarse las secreciones dos veces por día con algodón o papel tisú nuevos que se descartan de inmediato.
- Lavar sábanas, fundas y toallas con agua caliente y detergente.
- No maquillarse los ojos y mucho menos compartir el maquillaje.
- Preferir los anteojos a las lentes de contacto.
- No compartir utensilios cotidianos que no hayan sido escrupulosamente lavados.