De manera general el calzado adecuado proporciona al cuerpo una buena postura, protección a los pies, además de ayudar al desplazamiento diario. En las rutinas de ejercicio diario, estos beneficios deben mantenerse e incluso optimizarse. Es por ello que brindamos las siguientes recomendaciones:
-Busque siempre zapatos que sienta cómodos desde la primera puesta. El zapato no debe necesitar periodo de adaptación o modificaciones.
-Lleve los calcetines que utilizará normalmente para evitar comprar tallas superiores o inferiores a la suya.
-El zapato debe tener un espacio aproximado de un centímetro entre la punta del pie y la parte posterior del talón.
-Busque zapatos con suficiente amplitud que le permitan la movilidad de sus dedos y un excelente ajuste, es decir que no se deslice su pie.
-El calzado deportivo debe brindar soporte para el arco y elevar el talón de la mitad a tres cuartos de una pulgada por encima de la suela de los pies.
-Pruébese siempre ambos zapatos puede ser que uno de sus pies sea un poquito más grande que el otro.
-Cuando vaya de compras que su criterio de búsqueda no sea la moda sino la comodidad y el bienestar de sus pies.
-Si utiliza de manera diaria sus zapatos lo recomendable es cambiarlos cada seis meses, ya que estos pierden la amortiguación por el uso continuo.
-Conozca su pie, ya que si tiene un arco alto necesitará mayor absorción al choque y amortiguación. Por otro lado, si tiene bajo el arco del pie necesitarás, más apoyo y control en el talón.