LAS CLASES DE NATACIÓN SON LA MEJOR OPCIÓN PARA LA ACTIVIDAD FÍSICA DE LOS PEQUEÑOS.

Para los bebés, los beneficios de la natación son muchos: mejora sus capacidades cardiorrespiratorias, favorece su alineación postural y beneficia su coordinación muscular, desarrollando sus capacidades sensoriales y psicomotrices.

Es importante saber que para que los bebés tengan un pleno desarrollo debemos esperar hasta los cuatro meses de edad con actividades básicas y de reconocimiento del espacio e interacción con el agua.

Uno de los beneficios más importantes de la natación en los bebés es la estimulación de la confianza y, por lo tanto, la interacción con otras personas o, en este caso, con otros niños ya que también activa el juego y el espíritu de diversión.

La natación infantil y desarrollo psicológico

Además de lo mencionado anteriormente, el portal de Guía Infantil detalla que los pequeños benefician a nivel psicológico de la siguiente manera:

• El bebé se siente más seguro y disfruta mucho aprendiendo a nadar al sentir que sus padres tienen su atención concentrada en él.
• Incrementa el sentimiento de independencia y de autoconfianza del bebé. Aunque todavía no camine, el bebé se puede desplazar en el agua por si mismo, y eso puede favorecer el despertar de su inteligencia.
• El bebé aprende a nadar de una forma divertida y saludable. Y saber nadar también es una medida de seguridad. No hay que olvidar de que existe un gran porcentaje de accidentes por ahogamiento de niños.
• Estimula la confianza en uno mismo y por lo tanto mejora la comunicación con los demás.

POR: JAVIER ALEJANDRO CHAVARRÍA

COORDINADOR TÉCNICO FESAVELA

J.ALEJANDROCHAVARRIA@GMAIL.COM