Cuando el año en curso está por sellarse, tenemos como costumbre, el plantearnos propósitos con la ilusión de concretizarlos en un tiempo no muy lejano.

Comer más sano, bajar de peso o aprender un nuevo idioma, son parte de nuestras metas de año nuevo en las que frecuentemente olvidamos o minimizamos las que tienen relación nuestra salud mental y a causa de ello, junto a la psicóloga Dina Semsch, te compartimos puntos claves para que, al momento de trazar tus intenciones para este ansiado 2021, los valores. ¡Léetelos cuantas veces sea necesario!

• Recuerda frecuentemente que no solo vives una vez; vives todos los días, lo único que si haces una sola vez es morirte.
• Que este año te duela el cuerpo por hacer ejercicio, en vez del corazón por elegir personas equivocadas. Deja de plantearte propósitos solo al final de cada año. Hazlo en cualquier parte del año.
• No te permitas estar en guerra contigo mismo. Ten como objetivo de vida “sentirte bien” y no solo “verte bien”.
• No solo sonrías para las fotos. Sé tan feliz, exitoso y libre como en tus redes sociales… Sé más congruente en tu vida real.
• Recuerda que tus fracasos sacan moretones, pero no los conviertas en tatuajes. Entiende que los trastornos mentales son más reales que el desayuno de “influencer”.

• No olvides que todo es temporal: lo bueno, lo malo, tú, nosotros. Que tu “yo de principios de año” no se preocupe tanto por cosas que muy probablemente no sucedan.
• Trabaja para vivir, teniendo presente que el dinero es un medio, no un fin.
• Ten en mente que la salud mental si predice tu futuro, el horóscopo no… así que a deja de perder el tiempo leyendo el horóscopo y mejor invierte en tu bienestar.
• Cada vez que te quejes, también agradece.
• Convierte en hábito pensar, leer y comer sano.
• Sé claro y define mejor que google lo que andas buscando.
• Entiende que enojarte menos es igual de efectivo que el botox para evitar las arrugas.
• Que los productos, situaciones y personas que elijas cumplan con el requisito de “no ser tóxicos”.
• Deja de delegarle tanto a la motivación y empieza delegar más a la disciplina.
• No hagas listas eternas de las personas que te deberían pedir perdón, mejor empieza a perdonarte tú mismo.

Finalmente, recuerda, que este año, como todos, lo importante no es la mano de cartas que te tocó, sino cómo decidiste jugarla.

Fuente:
Dina Semsch Psicóloga
@Dinasemschpsicologa
dsemsch@gmail.com