Trabajadores, luchadores, con mente positiva, dispuestos a salir adelante, con ganas de compartir, de aprender nuevas cosas, llenos de amor, carisma, valentía y fortaleza; con una sonrisa que contagia y siempre dispuestos a ayudar a otros, así somos los salvadoreños.
En el día internacional de la felicidad, queremos compartir contigo un dato positivo de nuestro país, El Salvador fue ubicado en el puesto 40 del ranking de países más felices del mundo, aunque no lo creas, un país pequeño le ganó a los más grandes.
El Informe Mundial de la Felicidad de 2018 que toma en consideración 156 países, elaborado por expertos a instancias de Naciones Unidas y presentado hace unos días, reveló que El Salvador ocupa el puesto 40 del ránking de países más felices del mundo, con una nota de 6.167 de 10.
Las variables que se miden de cada país son el trabajo, entornos sociales y familiares, salud física, bienestar personal y mental, la esperanza de vida, riqueza, nivel de corrupción, entre otros.
Los salvadoreños somos más felices que quienes viven en otros países latinoamericanos como Nicaragua, Ecuador, Bolivia, Paraguay, Perú y Honduras.
Las razones son variadas, unos agradecen los momentos en familia, compartir con los seres queridos, la cercanía de las personas, los lazos de amistad y las reuniones. Por lo que aprovechan su tiempo libre rodeados de buena compañía.
Sin embargo, muchos coinciden en que la comida es una de las razones que los hacen felices, nuestros platos típicos son uno de los aspectos que más agradecen quienes viven en El Salvador y que más extrañan aquellos que viven lejos.
Otra de las razones que destacan los salvadoreños es la vida al aire libre, la oportunidad que se tiene de vivir en un país rodeado de montañas, hermosas playas, pueblos coloridos, iglesias y monumentos llenos de historia, sitios ideales para visitar un fin de semana o darte una escapada durante el día.
Las razones son innumerables, disfruta cada uno de tus días en el pulgarcito y siéntete afortunado de vivir en uno de los países más felices del mundo. Y no olvides sonreír en el Día Internacional de la Felicidad.