¿Te gustaría bajar de peso sin renunciar a ningún alimento? dirías que eso es imposible, pero ¡te equivocas! es posible gracias al método no-dieta, con el cual disfrutarás de manera saludable tus alimentos.
Este método es una idea de la Dra. Mónica Katz, radicada en Argentina, quien creó este programa con la finalidad de tratar de manera diferente los problemas de sobrepeso y obesidad sin planes restrictivos de alimentación.
NO-DIETA se basa en los principios de la alimentación intuitiva, una forma de comer que enfatiza una mentalidad saludable sobre la comida que consumes en lugar de enfrentar los alimentos como buenos o malos, explica la nutricionista Vittoria Amaya Manga.
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Cuando se quita la culpa por comer ciertas comidas (papas fritas/postres), sabiendo que las puede comer cuando quiera, permite que la persona realmente saboree lo que está comiendo y las ingiera con menos frecuencia. Todo esto gracias a un método revolucionario contrario a la mayoría de dietas de moda que quitan o restringen grupos completos de alimentos.
¿Cómo funciona?
Para que este método dé resultados, se debe aprender a comer cuando realmente tenemos hambre (no por emociones como tristeza, cansancio y aburrimiento) y dejar de hacerlo cuando nos sentimos satisfechos.
“Si sigue reglas estrictas de alimentación es probable que se sienta insatisfecho y piense constantemente en comida y termine comiendo cosas poco nutritivas”, explicó la nutricionista.
• Es un método que nos ayuda a tener una relación mental y físicamente saludable con la comida.
• Controla el sobrepeso, disminuyendo poco a poco los atracones y comilonas, ingiriendo solo cuando realmente se tiene hambre.
• Centra su atención en lo que se siente para dejar de comer antes que la llenura sea incómoda.
Todas las personas pueden seguir hacer un plan de alimentación que tome en cuenta enfermedades diagnosticadas como diabetes e hipertensión. Te puedes beneficiar de este método para estar más en sintonía con tu cuerpo.
RECOMENDACIONES
• La presentación es importante: has que tu plato se vea atractivo.
• Intenta recordar cómo te siente después de comer ciertos alimentos: cuando no comes bien, no te siente bien.
• Entrénate para dejar de tener antojos de salados, azucarados o grasosos. Algunos sabores son nostálgicos: un sorbete nos puede recordar a nuestra infancia.
• Debemos hacer connotaciones afirmativas con comida que beneficia más al cuerpo.
• Mantén comida fresca (vegetales y fruta) en tu refrigerador, lista para comer.
• Escoge una comida diariamente para realmente ponerle atención, sin distracciones (TV y celular): ¿Cómo se siente? ¿Cómo se ve? ¿Qué tan rápido te sientes satisfecho?
Fuente: Vittoria Amaya Manga, Nutricionista-Dietista
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