El Hospital de Diagnóstico realizó en nuestro país el Primer Simposio Centroamericano y del Caribe sobre la “Enfermedad Celíaca, un diagnóstico perdido”; el evento fue inaugurado el pasado 18 de mayo, por la Dra. Violeta Menjívar, Ministra de Salud Pública y Asistencia Social, Minsal; y por el Dr. Héctor Castaneda, Director Médico del Hospital de Diagnóstico.
La Dra. Violeta Menjívar hizo el llamado a los médicos asistentes a capacitarse e informarse a profundidad sobre el abordaje de la enfermedad celíaca, ya que es poco conocida y diagnosticada por los especialistas, pero afecta alrededor del 1% de la población mundial.
Esta patología es muy compleja y no siempre es diagnosticada por los especialistas; afecta de forma directa la mucosidad de las paredes del intestino delgado y en muchos casos está ligada a enfermedades como la hepatitis, sirrosis primaria, enfermedades del hígado, de la piel, reflujo gástrico, entre otras, según explicó el doctor Eduardo Mauriño, del Hospital Nacional de Gastroenterología "Dr. Carlos Bonorio Udaondo, de Buenos Aires, Argentina".
Por su parte, el Dr. Mauricio Cromeyer, especialista en este padecimiento y miembro del Hospital de Diagnóstico, comentó que la enfermedad celíaca es de naturaleza autoinmune, es decir, que nuestro cuerpo crea anticuerpos de defensa destructiva que dañan las vellosidades del intestino provocando una baja en las defensas del organismo.
Agregó que afecta a muchas personas que se encuentran genéticamente predispuestas desde su nacimiento y que presentan intolerancia permanente al consumo de gluten. El gluten es una proteína que se encuentra en la semilla de cereales y carece de valor nutricional.
Los especialistas recomiendan que una dieta libre de gluten es el tratamiento más efectivo para esta enfermedad, por ello las personas que la padecen deben evitar el consumo de alimentos que contiene partículas de gluten, como el trigo, la cebada, el centeno y en menor medida la avena.
Algunas de las manifestaciones más comunes de la enfermedad celíaca son: pérdida de peso, pérdida de apetito, fatiga, náuseas, vómitos, diarrea, pérdida de masa muscular, retraso de crecimiento y las alteraciones del carácter como irritabilidad, apatía, introversión y tristeza.