Sabemos que la limpieza de los dientes se debe hacer diariamente, es una de las claves para tener una buena salud oral, junto con el uso de hilo dental y, lo principal, las visitas periódicas al dentista.
En estos controles con el odontólogo se decidirá si es necesario o no hacer una limpieza dental más profunda en la consulta, lo que dependerá de las rutinas de higiene que tengamos. De todos modos, se recomienda hacer limpiezas dentales dentro de un período determinado.
¿Qué es una limpieza dental?
Primero que nada es importante no confundir este concepto con el de blanqueamiento, ya que este último es solo estético, no limpia sobre ni entre los dientes o las encías.
La limpieza dental realizada en la consulta se diferencia a la que uno hace a diario en la casa por la utilización de herramientas profesionales que ayudan a eliminar la placa y el sarro que se ha acumulado, ya que hay lugares muy difíciles de limpiar por uno mismo.
De hecho, el dentista usa una variedad de herramientas para distintas zonas, en general, profundizan en las encías, en la superficie de los dientes y entre estos. Todo dependerá de su salud bucal, hay quienes están más predispuestos a las enfermedades en las encías, por lo que necesitarán otro tipo de higiene.
Es importante la realización de este procedimiento por varias razones: ayuda a prevenir o protegerse de las caries, de la pérdida de piezas dentales y de posibles enfermedades de las encías.
¿Cada cuánto tiempo se debe realizar?
El tiempo entre una limpieza y otra dependerá de cada paciente, pero se recomienda visitar al dentista cada 6 meses, y en ese mismo tiempo hacer una limpieza. Ahora, si existen o existieron enfermedades en las encías, las higienes deben hacerse con mayor frecuencia, ya que así se evitarán las infecciones en ellas. Del mismo modo, si se sufre de enfermedades crónicas, como diabetes o enfermedades del corazón, ya que podrían existir una vinculación con la salud dental. También deberán ser más frecuentes las limpiezas en personas fumadoras.
Entonces, a tener en cuenta que los controles deben ser periódicos y que el tiempo entre una limpieza y otra dependerá de varios factores, pero generalmente deben ser entre 6 meses. Si estás atrasado con tu control o si ya es tiempo de hacerlo, te recordamos buscar alternativas que se adapten a tus necesidades y posibilidades económicas.
Fuente deenty.com