La quimioterapia es uno de los tratamientos que más se utilizan contra el cáncer. Su objetivo es destruir las células que componen el tumor para eliminar y evitar el crecimiento de las células malignas.
Existen varías vías de administración, pero la más frecuente es la intravenosa y en algunos casos, la vía oral, y se administra tras la cirugía como tratamiento complementario. En otras ocasiones, se administra como primer tratamiento con la finalidad de disminuir el tamaño del tumor (quimioterapia neoadyuvante).
En cuanto a los efectos secundarios van a depender de los fármacos que se administren a la paciente.
Estos medicamentos actúan básicamente sobre las células cancerosas, pero también inciden en las células normales. Por este motivo se producen algunos efectos secundarios, entre los que destacan alteraciones digestivas: náuseas y vómitos, caída del cabello, cese de la menstruación, etc. Dependiendo del tipo de tratamiento que se esté administrando, cada paciente reacciona de distinta manera y tiene unos efectos secundarios diferentes. No obstante, podemos recomendar, mientras dure el tratamiento, llevar una vida sana, realizando un ejercicio físico moderado (paseos) siempre que sus condiciones físicas se lo permitan.
Finalmente, es mi deseo que todo aquel paciente que lea este artículo sepa que no está solo en esta batalla pues hay muchos que ya la han librado y han salido victoriosos. Tenga mucha fe y rodéese de sus seres queridos pues ellos serán una fuente de inspiración para que usted se sane y restituya prontamente.