- Compre productos locales, debido a que algunas vitaminas se pierden durante el transporte y almacenamiento.
- Guarde los vegetales como los tomates a temperatura ambiente en lugar de en el refrigerador. Esto optimiza el proceso de maduración y aumenta los niveles del valioso licopeno.
- Prepare su fruta o verdura justo antes de que los necesite.
- Evite la pérdida de vitaminas solubles en agua, como la B y la C, eligiendo métodos de cocción que utilizan la mínima cantidad de agua, o de hecho nada de ella, como el tostado. Cuando hierva o cocine al vapor, guarde el caldo de la cocción para hacer salsas o sopas.
- Aumente su absorción de vitaminas solubles en grasa comiendo verduras con un poco de aceite. Disfrute de una ensalada de espinacas con aderezo de vinagreta, o tomate asado con un chorrito de aceite de oliva. También puede saltear una primavera de verduras.
- En ciertas épocas del año, vale la pena considerar los productos congelados. Esto porque las frutas y verduras se congelan rápidamente después de su cosecha, lo que significa que conservan más nutrientes que algunos productos supuestamente "frescos".
- Por último, ni lo uno ni lo otro, sino ambos. Disfrute de verduras crudas crujientes para completar su dosis de Vitamina C y cocine otros vegetales para fomentar los antioxidantes protectores.
Retomado de BBCMundo