La fiebre “chikungunya” es una enfermedad viral que se contagia a través del mosquito “Aedes aegypti” (transmisor del dengue) y por el mosquito “Aedes albopictus”.
La fiebre chikungunya es similar al dengue, pero produce dolores articulares y musculares más intensos y es de baja mortalidad.
Los síntomas aparecen entre cuatro y siete días después de la picadura del mosquito infectado, y la mayoría de los signos clínicos duran de tres a 10 días, aunque el dolor articular pueden persistir por más tiempo, según la Agencia de Salud Pública del Caribe.
La palabra “chikungunya“, que en swahili (lengua africana) significa “que se tuerce“, hace referencia a la postura corporal de los pacientes por el severo dolor articular.
El mal causa fiebre, dolor de cabeza, abdominal, dolor encima de los ojos, vómitos y sangrado por mucosas o piel.
Sin vacuna o cura para tratar la fiebre “chikungunya”, millones de personas han sido infectadas por la enfermedad, sobre todo en Africa y Asia, desde que se detectó por primera vez en 1952.
Los primeros casos en la región se reportaron en diciembre pasado en Martinica y Saint Martin, ambos países ubicados en el Caribe oriental, cuando la Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió una alerta epidemiológica. Xinhua.