El no utilizar una prótesis, o usar una más pesada o ligera que la requerida, puede ocasionar:
• Contractura muscular acompañada de dolor de cuello, hombro y espalda.
• Curvatura en la zona cervical de la columna.
• Hombro caído.
Es importante encontrar una prótesis que sea capaz de adaptarse no solo al perfil de cada mujer sino a su estilo de vida, además, se debe tomar en cuenta el tipo de mastectomía, o el momento en el que deben utilizarla.
La primera prótesis a utilizar es post-operatoria, y se usará hasta el momento en que sane la herida. Tiene una apariencia simétrica y da confianza durante la estancia hospitalaria. Este tipo de prótesis, por ser suave, después puede ser utilizada para dormir.
Según el tipo de cirugía así deberá ser la prótesis. Las hay parciales, simples o totales, bilaterales de ambas mamas, de conversión, extirpación completa de pezón, areola y nódulos linfáticos axilares, y radical, todo hasta los músculos y subcutánea.
A la hora de escoger la prótesis adecuada debe considerar cómo se sentirá más cómoda, pues existe una gran variedad. Por ejemplo, en forma de gota para una caída natural, triangular, con cola para los nódulos linfáticos axilares, entre otras.
Además puede encontrar prótesis especiales para utilizar en piscinas, el mar o baños sauna, que son de materiales más resistentes.