Los mismos genes que son beneficiosos en la infancia son perjudiciales en la vejez y eso puede explicar las causas genéticas últimas del envejecimiento, que empieza entre los 40 y 50 años, al final del periodo reproductivo, según un estudio de la Universidad Pompeu Fabra (UPF), en España.
La investigación supone un nuevo avance en las investigaciones sobre las causas del envejecimiento humano, un reto para el sistema de salud, debido a que no existe una teoría universal sobre las causas de la vejez.
Según el profesor, Arcadi Navarro, hasta ahora, los esfuerzos para entender las causas evolutivas del envejecimiento se limitaban a modelos de experimentación, pero actualmente la cantidad de datos disponibles de la relación entre genotipo y fenotipo representa una oportunidad sin precedentes de llevar a cabo análisis en humanos.
Según Navarro, "poder determinar si un individuo es sano o si desarrollará alguna enfermedad a lo largo de la vida ha aumentado mucho a medida que se han ido recogiendo más y más datos".
Los autores del trabajo también demostraron que hay mutaciones que son beneficiosas en la juventud pero se tornan perjudiciales en la vejez.
Los resultados de este estudio muestran que la frecuencia y el efecto de las mutaciones que causan enfermedades en la vejez son más grandes que las que causan enfermedad en edad temprana.
Por ejemplo, un medicamento que damos a un niño puede tener efectos negativos cuando sea viejo, pero también puede ocurrir que una persona muy enfermiza en la niñez, si sobrevive, tenga una salud de hierro en la tercera edad.