Lo creas o no, el dolor de rodillas es muy común y a menudo no tiene nada que ver con una lesión directa y más bien está relacionada con padecimientos como la artritis reumatoide, la gota, el sobrepeso o simplemente el paso de los años que va debilitando las articulaciones y disminuyendo el colágeno necesario para evitar la fricción entre los huesos.

Por supuesto, la indicación principal es acudir a tu médico ortopeda, para que pueda realizar los análisis y radiografías que lleven a un diagnóstico certero, recavando datos que contemplen si hay padecimiento de diábetes, osteoporosis u otro cuadro.

Sin embargo, también existen terapias de venta libre que han comprovado su efectividad, sin alterar otros padecimientos del paciente, como lo es la ingesta de colágeno hidrolizado como Gelicart, que promueve esta proteína en todo nuestro organismo, pero especialmente en las articulaciones. Su función es la de confeccionar el tejido conectivo, como la piel, cartílagos articulares, como los de las rodillas, huesos y tendones.

¿Aún no lo has probado? El alivio luego de varios días de terapia, mientras tanto deberás evitar movimientos bruscos, utilizar compresas frías o calientes y tomar un analgésicos para disminuir el dolor. Una crema medicada y una venda de compresión también pueden ayudar a aliviar la inflamación.