El Salvador ha confirmado en lo que va de este año al menos 12.929 casos de dengue y 126 de fiebre chikunguña, informaron hoy fuentes oficiales.
En lo que va del año se han confirmado "12.929 (casos de dengue), mientras que el año pasado teníamos 7.750", lo cual representa un aumento del 67 %, indicó el director de Vigilancia Sanitaria del Ministerio de Salud, Rolando Masís, durante una reunión con corresponsales de prensa internacional.
Del total de casos de dengue, que hasta la fecha ha provocado la muerte de cuatro personas, 156 son de la variedad grave o hemorrágica, añadió, al tiempo que precisó que el año pasado se registraron 128 graves durante el mismo período.
Por otro lado, El Salvador ha confirmado 126 casos de la fiebre chikunguña, 297 hospitalizaciones y al menos 37.973 "casos sospechosos" de esta enfermedad, destacó.
Masís explicó que no se da con frecuencia una cifra de casos confirmados de chikunguña ya que no a todos los pacientes sospechosos se les hacen las pruebas de laboratorio porque, según el reglamento sanitario internacional, esto es necesario solo para demostrar la presencia del virus.
Al principio del brote de la enfermedad, en junio pasado, se hicieron pruebas en los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos y mediante reactivos que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) le donó a El Salvador, indicó.
"Posteriormente hemos ido haciendo pruebas en la medida que el chikunguña ha ido avanzando para saber si hay ya chikunguña en lugares donde antes no teníamos", destacó.
"Como en este momento básicamente todo el país tiene" la enfermedad, que está en "la mayoría de los municipios, ya no se justifica hacer una gran cantidad de pruebas, porque ya sabemos que tenemos chikunguña", enfatizó.
La posición de Masís fue respaldada por el representante de la OPS en El Salvador, José Ruales, durante el encuentro con la prensa internacional.
"Dado que esta no es una enfermedad de alta letalidad, no se requiere la confirmación de laboratorio para establecer el diagnóstico (...), salvo que haya una sospecha cuando hay un brote epidémico para identificar que realmente se está ante la enfermedad", indicó Ruales.
"Por eso tenemos acá 126 casos" confirmados de chikunguña y en los países vecinos se manejan cifras menores "que se han tomado para confirmar la presencia del virus en la zona; el resto no necesariamente van a tener un diagnóstico de laboratorio porque no
es necesario", enfatizó el representante de la OPS.
Masís destacó que El Salvador tiene una capacidad laboratorial que "ha permitido hacer más pruebas" que el resto de países de Centroamérica y por eso registra más casos.
Además, de acuerdo a Ruales, actualmente El Salvador "tiene un sistema de información bastante amplio, más de 1.200 unidades notificadoras" de Salud, cuando antes "habían solo 200".
"Es decir, el país recoge buena información: si hay un paciente febril en una unidad de salud de un cantón alejado (...), esa información llega al Ministerio de Salud", y éste "de acuerdo al reglamento sanitario internacional, nos informa e informa públicamente", agregó.
El Salvador está en alerta estratificada contra el dengue y la chikunguña desde el 25 de junio. De los 262 municipios del país 27 tienen alerta naranja (alto riesgo), 76 amarilla (preventiva) y 159 verde (precaución). ACAN-EFE