La ansiedad es un enemigo silencioso, afecta directamente nuestro desempeño físico y mental. Cada día se incrementa el número de personas que sufren este padecimiento. En esta ocasión te presentamos los efectos negativos que ocasiona en nuestro organismo:

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Problemas en huesos y músculos: Es común que los tendones se vuelvan tensos cuando estamos ansiosos, ocasionando dolores, rigidez e incluso fuertes dolores de cabeza.

Problemas sexuales: La ansiedad disminuye el libido y aumenta la posibilidad de disfunciones sexuales, tanto para hombres como para mujeres la fertilidad disminuye cuando se encuentran ansiosos.

Problemas respiratorios: Uno de los síntomas de este trastorno es el aumento de la frecuencia respiratoria y la falta de aliento, puede desencadenar una enfermedad pulmonar obstructiva.

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Insomnio: La preocupación por diferentes situaciones afecta nuestro descanso, no dormir lo suficiente provoca que perdamos la concentración y realicemos nuestras actividades.

Daños neurológicos: La concentración y la memoria fallan cuando nos sentimos ansiosos, esto termina por afectar nuestro desempeño y aprendizaje.

Problemas cardíacos: La frecuencia cardiaca y la presión sanguínea aumentan, somos propensos a arritmias, accidentes cerebrovasculares y ataques cardíacos.

Problemas gastrointestinales: Se presentan molestias gastrointestinales como los vómitos, diarreas, mala absorción de los nutrientes, mala digestión, hinchazón y el síndrome del intestino irritable.

Complicaciones en la piel: Algunos de los efectos son visibles en nuestra piel, entre ellos el acné, la resequedad e incluso el envejecimiento.