Cuando tu mascota esta entrenada todos en casa se benefician porque se aprende a manejar las situaciones con tu mascota sin perder la calma.
Muchos son del pensamiento que no pasa nada si su mascota se orina en el pasillo, ladra cuando oye cualquier ruido, gruñe a las visitas o pide comida en la mesa, esto es “normal”.
Pero realmente no comprenden que esos comportamientos deben ser corregidos, pues son muchas las desventajas de tener un perro no entrenado en casa. Entre ellas están:
- Si es miedoso puede volverse agresivo, escapar de las visitas, esconderse al ver un desconocido, ladrar y enseñar los dientes como señal de agresividad si no se apartan de su camino, etc.
- Un perro dominante morderá si no consigue lo que quiere. Uno destructivo te hará gastar un dineral reponiendo los muebles y la ropa que rompa.
- Si se orina en el pasillo un día puede hacerte resbalar y sufrir daños.
- Todos estos problemas se arreglan con el adiestramiento canino, tienen solución gracias a una educación adecuada.
Mediante el entrenamiento tu perro podrá ser el mejor amigo que pudieras desear, porque su comportamiento será ejemplar y no tendrás un solo motivo para enfadarte. Se acabarán los gruñidos y ladridos a altas horas de la noche, la orina y las heces por doquier, etc. Será un animal saludable y tranquilo.
Toma diez minutos al día enseñándole trucos, lo que reforzará su confianza en ti, y a partir de ahí hazle saber lo que está bien y lo que está mal.
Si tu perro tiene un carácter dócil es muy probable que vas a poder lograr mucho con él y no vas a necesitar un entrenador.
Acá te damos un listado de tips que puedes emplear:
- Haz que socialice pero no lo fuerces
Todos los perros necesitan socialización constante, con otros perros, otras personas, en parques, otros ambientes, etc. sin embargo debes aprende a escuchar a tu perro. Si tu mascota se siente incómodo cuando se encuentra con otro animal o persona, no insistas en que salude. Forzar la convivencia puede resultar un gran problema.
Asegúrate que a tu perro le brindas toda la atención que precisa. Hazle saber cuando él se ha comportado bien.
- Adiéstralo sin correa
Ofrécele señuelos y premios desde el principio en ves de usar una correa, no toques a tu perro para obligarlo a obedecer. Sino, sólo responderá cuando lleve puesta la correa o cuando se encuentre al alcance de la mano. Por el contrario, usa la mano para acariciar (premiar) al perro cuando obedezca.
- Dile que no
No hay nada malo en decirle a tu perro no, aunque siempre es mejor decirle lo que tú quieres que haga, así evitas confusiones.
- Ponte de acuerdo
Cada vez que estés entrenando a tu perro, es importante que todos los miembros de la familia participen. Deben llagar a un acuerdo sobre las reglas, es la clave del éxito para que tu perro no se confunda y alcance un buen comportamiento.
- Plantea expectativas realistas
Cambiar el comportamiento de tu perro requiere tiempo. Por ejemplo, si no te importó que tu perro se subiera a la gente en los últimos siete años y ahora decides que no quieres que él haga eso nunca más, cambiar ese comportamiento llevará mucho más tiempo que si lo hubieras hecho cuando era un cachorro.
Sin embargo, recuerda que nunca es demasiado tarde para cambiar el comportamiento de algunos perros, sólo que tomará más tiempo que en otros.
- Invierte en su alimentación
Alimentar a tu perro con una dieta de calidad, con cantidades adecuadas de proteínas, es básico. Además de mejorar su salud favorece su comportamiento. Por eso es recomendable que siempre consultes con tu veterinario sobre cuál es la dieta, cantidad y alimento adecuado para tu perro.
- Recompénsalo
La idea de utilizar golosinas para entrenar a tu perro, puede funcionar como un refuerzo. Pero no abuses de ello. Puedes combinar su entrenamiento con juegos y paseos.
- Dale de a poco libertad
Deja que tu perro gane gradualmente libertad en toda su casa. Un error común que se comete es darle demasiada libertad muy pronto. Esto puede conducir fácilmente a accidentes en el hogar o a que mastiquen destructivamente todo lo que esté a su paso. Por lo tanto, quizás cerrar las puertas de algunas habitaciones desocupadas sea necesario.
Recuerda que estos consejos pueden ayudarte a mejorar la convivencia con tu canino, pero necesitas ser constante y disciplinado para hacerle saber siempre que es lo que quieres de el, aparte de compañía y cariño.