El sudor es normal e incluso saludable, pero si sudas de forma abundante es posible que padezcas hiperhidrosis. Este problema médico ocasiona sudor excesivo, especialmente en las palmas de las manos, las plantas de los pies y las axilas. Y, aunque no es un problema médico grave, puede generar incomodidad física y ocasionar situaciones vergonzosas. No obstante, es posible controlarlo e incluso tratarlo de diversas maneras. De hecho, solo hay que encontrar la fórmula que se adapte mejor a tu organismo.
El sudor es un líquido salado que producen las glándulas de la piel. Gracias a la transpiración, el cuerpo puede enfriarse. Así, el sudor se produce principalmente debajo de los brazos (axilas), en los pies y en la palma de las manos. Cuando el sudor se mezcla con las bacterias de la piel puede causar mal olor. Por este motivo, es imprescindible usar antitranspirantes o desodorantes para controlar el olor.
Por otro lado, cuando hace calor, tienes fiebre, estás nervioso o practicas deporte, es normal transpirar mucho. Esto también les ocurre a algunas mujeres durante la menopausia. Sin embargo, si transpiras demasiado es posible que tengas un trastorno de las tiroides, disminución del azúcar en la sangre u otro problema de salud.
Además, si transpiras demasiado poco (anhidrosis) tu cuerpo podría sobrecalentarse. Entre las distintas causas de la anhidrosis se encuentran la deshidratación, las quemaduras y algunos trastornos de la piel.
Aplícate antitranspirante por la noche
Según los médicos, es mejor aplicarse el antitranspirante por las noches, justo antes de dormir. Esto se debe a que el antitranspirante tarda entre 6 y 8 horas en introducirse en los conductos sudoríparos y obstruir los poros de forma adecuada.
Además, el antitranspirante puede utilizarse en cualquier parte del cuerpo, por lo que si observas sudor en las palmas de las manos, los pies o las manos también puedes aplicarlo en estas zonas. Solo debes evitar utilizarlo en el rostro, ya que podría causarte irritación.
Evita los alimentos picantes
Los alimentos picantes pueden hacer que produzcas una mayor cantidad de sudor. Por este motivo, no deberías comer nada que sea picante (al menos durante los almuerzos en los días de trabajo o cuanto estés en una reunión importante).
También deberías evitar alimentos como el ajo y la cebolla, ya que estos olores fuertes podrían salir a través del sudor. De la misma forma, las frutas, verduras y productos integrales ayudan a mejorar el olor del sudor.
Reduce los malos hábitos
El tabaco, el consumo de alcohol y el café podrían ocasionar que sudes más. Por esta razón, deberías reducir los malos hábitos en la medida de lo posible. El sobrepeso también ocasiona un incremento en el sudor, por lo que bajar un poco de peso podría ayudarte a controlarlo.
Por supuesto, en ocasiones el sudor está relacionado con una enfermedad oculta (por ejemplo, las enfermedades cardiovasculares o el hipertiroidismo) por lo que deberías acudir al médico si notas que empiezas a sudar en exceso.