Un equipo internacional liderado por investigadores chinos ha identificado seis nuevas predisposiciones genéticas a sufrir la lepra en un estudio que publicó la revista científica "Nature Genetics".
Esta investigación, encabezada por miembros del Instituto de Dermatología y Venereología de la provincia de Shandong (en el este de China), confirmó las 18 predisposiciones a sufrir esta enfermedad infecciosa que ya se conocían y añadió otras seis, con lo que aporta una información que se espera que ayude a mejorar los tratamientos.
El trabajo, que duró cuatro años, se realizó a partir de un amplio estudio de asociación del genoma completo (que sirve para detectar posibles relaciones de ciertos rasgos con el genoma).
Un total de 8.313 enfermos en la población del país asiático participaron en ese estudio, con un grupo control de 16.017 personas.
Los científicos chinos, con la colaboración de instituciones de Singapur, Estados Unidos, el Reino Unido y los Países Bajos, establecieron un modelo de predicción de riesgos basado en las 18 predisposiciones a padecer la lepra que ya se sabía que existían.
Además de esas 18, se descubrieron otras seis, aunque los autores de la investigación, liderada por Zhang Furen, del Instituto de Dermatología y Venereología de Shandong, reconocen que eso sólo explica parcialmente que se herede la enfermedad y que faltan por descubrir otros factores de riesgo genéticos.
Sin embargo, los científicos confían que este modelo permita diseñar un método de diagnóstico precoz de la lepra.
Pese a ser curable, esta enfermedad tiene un período de incubación de unos cinco años y sus síntomas pueden tardar hasta dos décadas en aparecer, lo que retrasa el inicio del tratamiento.
"El establecimiento del modelo hace posible un diagnóstico temprano de la lepra y es el primer paso en traducir nuestros hallazgos en tecnología práctica", dijo Zhang Guocheng, vicedirector del departamento de dermatología y venereología del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de China.
Asimismo, los científicos encontraron asociaciones entre las predisposiciones a la lepra y enfermedades autoinmunes e inflamatorias, lo que aporta una nueva clave sobre la reacción molecular a la infección.
La lepra es una enfermedad crónica causada por el bacilo de Hansem que puede causar lesiones progresivas y permanentes en la piel, los nervios, las extremidades y los ojos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró por eliminada esta enfermedad (con una tasa de prevalencia mundial de menos de 1 caso por cada 100.000 habitantes) en el año 2000 y en los últimos años se detectan más de 200.000 nuevos casos anualmente en todo el mundo, de los cuales alrededor de 1.000 se localizan en China.