El secreto de las pieles radiantes está en el carrito de las compras.

Tomate

Nada más fácil que añadir un tomate a cualquiera de tus platos para cargarlo de vitamina C que matiene la piel firme ya que estimula la producción de colágeno. Además, el licopeno (lo que le da su color rojo) protege a tu piel del sol evitando así su envejecimiento prematuro.

Té verde

Los beneficios del té verde parecen formar una lista interminable. Y sí, mejorar la piel es también uno de ellos. Sus efectos reparadores llegan tan lejos como para proteger de daños en el ADN y de los efectos del sol. Además, tiene efecto antiinflamatorio.

También puedes leer: ¿Es normal que me arda la piel cuando me aplico una nueva crema facial?

Semillas de chía

Si aún no has probado las semillas de chía, ha llegado el momento. Además de NO contener gluten (y sí mucha proteína y fibra) , son una excelente fuente de ácidos grasos omega 3 que mantienen la piel hidratada. Mézclalas con la leche vegetal que más te guste, déjalas toda la noche en la nevera y tómalas al despertar con bayas o semillas para un desayuno sanísimo que tu piel agradecerá.