Los daños en el oído se dan, muchas veces, por lesiones que son más comunes de lo que pensamos.
Acá te contamos 5 de ellas:
Ruidos fuertes. Estar cerca de una fuente de sonido, como parlantes, durante un tiempo específico puede provocar alguna pérdida auditiva puntual. Sin embargo, si la exposición es constante y la exposición a ruidos es continua, puede generar una pérdida auditiva progresiva y permanente.
Introducción de objetos. Es muy común que muchas personas utilicen uñas, lápices o cotonetes para rascar su oído, lo que puede provocar daños en la parte externa del mismo. Además, realizar estas acciones con frecuencia puede llegar a perforar el tímpano.
Actividades al aire libre. Realizar actividades como andar en bicicleta, monopatín o patines puede generar lesiones en nuestros oídos si producimos una caída. Por eso, recomendamos llevar siempre el caso, para proteger nuestras orejas pero sobretodo nuestra vida.
Viajes en avión. Cuando la presión del aire no se equipara en ambos lados del tímpano, se produce un pequeño barotrauma, provocando pérdida de oído puntual. Esto se genera, especialmente, en los viajes en avión y sobre todo en los aterrizajes y despegues, por lo que nosotros recomendamos usar tapones.
Traumatismos en la oreja. Golpes o accidentes que provoquen golpes directos en la oreja pueden provocar lesiones de oído. En caso de ocurrir, lo mejor es consultar con un profesional para que determine la entidad de la lesión.