Para revertir la condición del hígado graso es fundamental evitar el consumo de alcohol. Además, debemos seguir una dieta sana y equilibrada y, en la medida de lo posible, basada en alimentos naturales.
El hígado graso surge cuando este órgano comienza a tener dificultades para realizar sus funciones habituales por culpa de la acumulación de ácidos grasos.
El hígado graso se presenta con mayor frecuencia en pacientes con obesidad, alcoholismo o diabetes tipo 2. Cuanto antes se detecte el hígado graso y se mejore la alimentación, más rápido se puede revertir.
Aunque el médico puede prescribir algunos medicamentos, serán más efectivos si los acompañamos con un cambio en la dieta. Aquí tienes los alimentos que mejor combaten este problema.
1. Tamarindo:
El tamarindo es una de las mejores frutas para combatir el hígado graso. Esta fruta tropical es deliciosa y de gran aporte nutricional. Al ser rica en fibra ayuda a mejorar la digestión mientras elimina el exceso de grasa.
Los ácidos insaturados del tamarindo actúan como descongestionante y protector del hígado. Para obtener todos estos beneficios puedes preparar una infusión.
2. Legumbres:
El consumo de legumbres es un remedio efectivo contra el hígado graso gracias a sus proteínas. Al ser bajas en calorías, también regulan el peso. Su contenido en fibra también reduce los niveles de colesterol, otro factor de alto riesgo para el hígado graso.
Al cocinarlas se debe evitar el uso de sal fina. Se puede usar sal gruesa siempre que se eviten los excesos. También se pueden combinar con algunas especias que mejoran sus sabor.
Lo único que se debe tener en cuenta a la hora de consumir legumbres es la importancia de evitar excesos. Media taza de cualquier legumbre al día es suficiente, en especial cuando la persona es diabética.
3. Fresas:
Depurar el organismo es buena estrategia para disminuir los efectos del hígado graso. A través de este procedimiento eliminamos gran parte de las toxinas que se acumulan y nuestros órganos se limpian.
Las fresas son excelentes para depurar y desintoxicar por su alto contenido de fibra.
Al ser ricas en vitamina C fortalecen el sistema inmunológico y sus ácidos orgánicos previenen la acumulación de grasas. En caso de que ya las haya, como con el hígado graso, las elimina, desinfecta y desinflama.
Por su sabor no tendrás problemas al consumirlas. Puedes incluirlas en tu dieta crudas, solas o con yogur. También puedes usarlas para preparar batidos, panes, ensaladas o con cereales. Aquí te dejamos la receta de un batido delicioso y muy saludable con fresas.
4. Limón:
El limón es uno de los alimentos con mayores beneficios que puedes encontrar. Al ser rico en vitamina C y en antioxidantes, previene muchas enfermedades. Además, si ya tienes hígado graso, también puede ayudar a sanarlo.
Esta vez te hablaremos de un remedio que ha sido muy difundido en los últimos años: un vaso de agua con jugo de limón. Esta bebida es perfecta para combatir el hígado graso y mejorar la digestión.
Aunque el limón nos parece demasiado ácido, para nuestro cuerpo es alcalino. Esto significa que regula nuestros niveles de pH, muy importante para tener una buena salud.
Para este remedio solo necesitas un vaso de agua templada o tibia y el jugo de un limón. Revuelve muy bien y tómalo cada mañana en ayunas.
5. Granos integrales:
Los alimentos ricos en carbohidratos simples deben quedar completamente fuera de tu dieta cuando tienes hígado graso.
Esto no significa que no puedas comer carbohidratos. Al contrario: estos son necesarios para tener energía y realizar todas tus actividades.
Lo recomendable es que elijas granos integrales, que también son ricos en fibra y facilitan la reducción de grasa.
Al incorporar estos productos en tu dieta evitarás los picos en los niveles de azúcar y aumento del LDL o colesterol malo.
6. Espinaca:
Las verduras de hoja verde siempre deben estar presentes en tu dieta, en especial las espinacas. Por su alto contenido de fibra son ideales para agilizar el tránsito intestinal. El ácido fólico regula las funciones de hígado y riñones.
Debido a que las espinacas son ricas en clorofila, absorben y eliminan las toxinas y grasas del hígado. En caso de que no seas un gran amante de las espinacas, considera incluirlas en batidos y aprovecha todos sus beneficios.
El hígado graso es un problema bastante común en quienes tienen una mala dieta. Elimina todos los riesgos consumiendo los alimentos que ayudan a depurarlo. Recuerda que nunca es demasiado pronto para combatirlo o eliminarlo.
Vía: mejorconsalud.com